Venezuela requiere se levante el boicot financiero y el sabotaje económico
Jaua cuestionó las cifras presentadas por la asociación Cáritas de Venezuela las que señalan que van a morir 300 mil niños por hambre en Venezuela, para cuando se analiza la muestra se demuestra que se hizo el estudio en las cuatro parroquias más pobres de cuatro estados del país con un universo de 600 niños evaluados
Venezuela lo que requiere en este momento es que se levante la presión y el sabotaje económico y se restablezca su derecho a comercializar, comprar y obtener líneas de crédito en el mundo para así abastecer plenamente el mercado nacional en los rubros de alimentos y medicinas.
Así se expresó este miércoles el ministro del Poder Popular para la Educación, Elías Jaua Milano, durante su programa Encuentro Popular número 62 que transmite el Sistema Radio Mundial, emisoras comunitarias así como por Colombeia Televisión.
Destacó el encuentro celebrado en Santo Domingo el pasado viernes y sábado con la presencia de los voceros de la oposición venezolana, los cancilleres de países acompañantes y en especial la dedicación del presidente Danilo Medina en pro del entendimiento Gobierno-Oposición.
Jaua resaltó que el debate fue arduo donde les correspondió al equipo negociador del Gobierno desmontar un conjunto matrices carentes de fuentes científicas en especial lo que la oposición llama “crisis humanitaria”.
En este sentido refirió que no se puede negar que Venezuela atraviesa una situación económica compleja, pero, el Estado Venezolano a su juicio, tiene la fuerza y la estructura para garantizar el sistema de salud, la educación y avanzar en el sistema más idóneo en la distribución de alimentos, las pensiones.
Indicó asimismo que les increparon (a la dirigencia opositora), para que les informaran sobre cuáles son las organizaciones y cuantas toneladas de medicamentos y alimentos han conseguido para desarrollar lo que denominan “canal humanitario”.
Acotó que se les pidió en ese sentido a los voceros de oposición la información precisa para que el Estado venezolano pueda comprar en esos países y sin que se les impida acceder a las líneas de crédito a corto plazo como se actúa en el comercio internacional .
Añadió que Venezuela ha comprado a la Organización Panamericana de la Salud a través del Fondo Estratégico Rotatorio cerca de 20 millones de medicamentos para atacar la malaria y otros medicamentos esenciales. Acotó que el Estado venezolano ha invertido en este año 1.100 millones de dólares en medicamentos, la mayoría provenientes de la India.
Jaua cuestionó las cifras presentadas por la asociación Cáritas de Venezuela las que señalan que van a morir 300 mil niños por hambre en Venezuela, para cuando se analiza la muestra se demuestra que se hizo el estudio en las cuatro parroquias más pobres de cuatro estados del país con un universo de 600 niños evaluados.
Pidió seriedad a estas organizaciones a la hora de emitir informaciones que no se ajustan a la realidad añadiendo que el Instituto Nacional de Nutrición realizó una evaluación a más de 60 mil niños en lo que va de año, determinando que un porcentaje menor al 10% está bajo amenaza nutricional.
Al respecto subrayó que antes de la llegada del Comandante Hugo Chávez al poder en el país la desnutrición alcanzaba 27% y se logró bajo políticas públicas reducirla a 5%, y se han presentado nuevos focos que se están monitoreando y atacando.
Jaua enfatizó que Cáritas ofreció traer medicamentos por 100 mil euros para su propia distribución. “Ojalá hubieran llegado los medicamentos que ofrecieron, debo decir esto porque en estos temas no se puede hacer show, no se puede hacer política de la baja, si hay un niño desnutrido o una persona sin medicamento hay que atenderlo, pero no se puede hacer show con el dolor ajeno”.
Indicó que es necesario visualizar el camino esencial de crear unas condiciones para ir a las elecciones presidenciales en 2018 donde cada uno de los venezolanos pueda acudir sin presión y angustias a decidir cuál es el modelo a preservar en el país, el modelo de la inclusión plena, de la educación gratuita y de calidad a otro de exclusión y subordinación a potencias extranjeras.