Trump solicita a la Corte Suprema continuar deportaciones de migrantes venezolanos a El Salvador

El Gobierno de Donald Trump ha solicitado este viernes a la Corte Suprema de Estados Unidos autorización para reanudar la deportación de migrantes venezolanos hacia El Salvador, utilizando la controvertida Ley de Enemigos Extranjeros de 1798. Esta solicitud surge tras el rechazo de la Corte Federal de Apelaciones en Washington, que, con una votación de dos a uno, mantuvo vigente una orden que prohíbe temporalmente dichas deportaciones.
La decisión inicial fue emitida por el juez federal de distrito, James Boasberg, quien argumentó que existe un «fuerte interés público en prevenir la deportación errónea de personas basadas en categorías que no tienen derecho a impugnar». Esta medida ha sido objeto de críticas por parte del presidente Trump y sus funcionarios, quienes han cuestionado la autoridad del juez y se han negado a proporcionar información adicional sobre las deportaciones bajo el argumento de un «privilegio de secretos de Estado».
La procuradora general interina, Sarah Harris, ha defendido la postura del Gobierno al afirmar que el tribunal inferior se ha «extralimitado» al prohibir las deportaciones. Harris argumenta que esta decisión socava el juicio del presidente sobre cómo proteger a la nación contra organizaciones terroristas extranjeras y podría tener consecuencias negativas para negociaciones internacionales delicadas.
El Gobierno venezolano ha manifestado su preocupación por la situación de los migrantes deportados, alegando que estos están secuestrados y que sus derechos han sido violados. Además, han reiterado su compromiso con el retorno seguro y digno de sus ciudadanos.
Este conflicto entre los poderes Ejecutivo y Judicial resalta las tensiones actuales en torno a las políticas migratorias y plantea interrogantes sobre el uso de normativas históricas en contextos contemporáneos. La Corte Suprema ahora deberá decidir si permite al Gobierno avanzar con su plan polémico.