Roso Grimau: Es necesario controlar lo que hacen los diplomáticos extranjeros en el país (+ Audio)
El 12 de febrero, el presidente de la República, Nicolás Maduro, denunció un nuevo intento de golpe de Estado contra su gobierno y la Revolución Bolivariana por parte de la ultraderecha nacional, financiada por el gobierno de Estados Unidos. En ese contexto, anunció este sábado una serie de medidas para proteger la nación ante las pretensiones injerencistas de Estados Unidos, que en lo que va de año ha emitido 65 declaraciones contra nuestro país.
Las medidas contemplan limitar el número de funcionarios estadounidenses en territorio venezolano y aquellos que permanezcan en el país sólo podrán realizar reuniones con previa autorización del Gobierno venezolano, en el marco del derecho internacional.
El analista internacional Roso Grimau celebró las medidas anunciadas por el Ejecutivo y comentó: "Por primera vez en la historia de Venezuela se está aplicando la reciprocidad, que es algo que está en todos los tratados internacionales. Faltará estudiar otras medidas que habrá que aplicar a otros países y otras embajadas, que están implicados también en intentos de golpes de Estado contra nuestro país".
"Hay que controlar lo que hace cualquier diplomático extranjero en nuestro país", agregó el profesor.
Explicó: "Esa guerra que hemos llamado de quinta o de sexta generación es la política de Estado de Estados Unidos contra Venezuela, en la cual lo primero es la matriz mediática, es decir, infundir en el imaginario colectivo del mundo entero que Venezuela es un Estado fallido para que sea aceptada una intervención militar de cualquier tipo, incluso con un ejército difuso como Estado Islámico, que es el que están usando en el Medio Oriente".
El experto en asuntos internacionales durante su participación en el programa El Desayuno, que transmite Venezolana de Televisión, denunció que en los años que tiene Estados Unidos como nación, su gobierno ha perpetrado al menos 159 acciones injerencistas en territorios latinoamericanos y caribeños.
Grimau precisó que estas 159 injerencias corresponden al conteo efectuado hasta 2010 y agregó: "Las injerencias no solamente se miden en invasiones militares sino también en acciones desestabilizadoras desde el punto de vista económico, como lo ha hecho Estados Unidos a lo largo de casi toda su historia, desde que se estableció como nación, contra países latinoamericanos y caribeños".
Dijo con la llamada Doctrina Monroe, "Estados Unidos estableció su falsa moral para atribuirse ser el juez de los pueblos del mundo, hacer intervenciones armadas y a través de ello lograr apoderarse de las riquezas de otros países".
El 2 de diciembre de 1823, el presidente estadounidense James Monroe, en su mensaje al Congreso, expuso la doctrina que se convertiría en la máxima de la política exterior de Washington: "América para los americanos". La Doctrina Monroe nació con el objetivo de conquistar América para que fuera gobernada por la élite estadounidense.