«Chávez complementó mi formación como ingeniera y como ser humano»
Una humanista que se hizo ingeniera, es la primera impresión que puede generar Jacqueline Faria, mujer emblema del chavismo desde los días de Chávez hasta la gestión de Nicolás. Ambos mandatarios le han confiado a ella diversas funciones que la pulieron en materia de números, cálculos y centímetros cúbicos, pero también en trabajo social concientizador, con el pueblo y para el pueblo.
Desde su oficina, donde se aprecia una panorámica inspiradora del Parque Hugo Chávez, la actual jefa del Gabinete de Ciudad de la Alcadía de Caracas, da una bienvenida amigable, y aunque este tipo de responsabilidades genera una agenda bien apretada, habló sin apuros, por más de una hora desempolvó historias, unas de lucha, otras de amor, como quien mira el pasado y se le dibuja una leve sonrisa. Se despidió diciendo “agradecida por la oportunidad de hacer esta remembranza que me permite reafirmar y darle gracias a mi pueblo y a la Revolución Bolivariana”.
Como muchos en esa época, se vino de Santa Lucía, estado Zulia, a Caracas, cuando aún era una adolescente, ella y su padre llegaron a buscar una mejor calidad de vida, con el tiempo le siguieron otros tres hermanos y su madre.
De esos días recuerda lo cuesta arriba que era para una familia salir adelante, su papá comerciante de oficio, tuvo que asumir distintas tareas para sacarlos adelante, su mamá siempre se dedicó a las labores del hogar, “los más difíciles y menos pagados”, dice.
“Mi bachillerato lo terminé aquí, en el Colegio Madre Emilia. Nosotros llegamos en condiciones muy adversas (…) papá hizo de todo, incluso trabajó en la construcción de Parque Central, esa fue la semilla para convertirme en ingeniera”.
