La historia de Alexander Sanoja, quien murió quemado durante guarimba en Maracaibo
Lo identificaron por una calza en una de sus muelas y un tatuaje en el brazo derecho. Se trataba de Alexander Rafael Sanoja Sánchez, de 38 años, padre de dos hijos de 8 y 13 años y empelado de la clínica Falcón de la capital zuliana
Apenas ayer en la tarde fue identificado el hombre que murió quemado en el sector Sabaneta, cerca del puente España de Maracaibo, en medio de una guarimba. Desde el miércoles, su mujer, su madre y otros parientes, lo buscaban en hospitales, cuerpos policiales y morgues. A las cinco de la tarde del jueves lo hallaron en la morgue forense.
Lo identificaron por una calza en una de sus muelas y un tatuaje en el brazo derecho. Se trataba de Alexander Rafael Sanoja Sánchez, de 38 años, padre de dos hijos de 8 y 13 años y empelado de la clínica Falcón de la capital zuliana.
Aura Sánchez de Sanoja y Yakira Sanoja, madre y hermana de está víctima, relataron esta mañana en medio del llanto, la odisea por la que pasó su hijo hasta que finalmente encontró la muerte. Alexander tenía una rutina diaria desde hace diez años.
Salía de su casa en el municipio Santa Rita todas las mañanas para llegar a su empleo como técnico en refrigeración en la clínica Falcón. Dejaba en casa a su mujer y a sus dos hijos, una niña de ocho años y un varón de 13.
Partía en bus hasta el centro de Maracaibo y luego tomaba un carrito hasta La Falcón. A las cuatro de la tarde culminaba su labor pero el pasado miércoles el retorno al hogar no fue igual. Se le hizo difícil el transporte y tuvo que tomar una “colita” hasta llegar nuevamente al centro de la ciudad. Se encaminó a la parada del bus y subió, al parecer creyendo que ya había superado los mayores obstáculos que trancaban las vías. El autobús arrancó y no pasaron diez minutos para que se enterara que la situación era más grave de la que imaginaba. El chofer del colectivo de transporte al ver que no había “trocha” que tomar para enrumbarse hacia la Costa Oriental del Lago, optó por devolverse.
Angustiado, Alexander llamó por teléfono a su mujer en Santa Rita y le contó la tormentosa travesía. Resignado a no poder llegar a su casa, decidió quedarse en la residencia de su suegra en El Pinar. Detuvo a un mototaxista considerando que era el transporte indicado. Cerca de las seis de la tarde se montó en la parrilla de la moto y el conductor cogió hacia Sabaneta. Cerca del puente España, una guarimba sorprendió al conductor de un camión cava, modelo NPR. En un intento de saqueo, el chofer hizo una maniobra para evadir a los violentos y una bomba molotov le impactó en el parabrisas. En ese momento, el mototaxista se desplazaba por esa misma vía y perdió el control al atravesársele el camión, estrellándose contra este. El fuego se encargó de consumir los dos vehículos y las llamas atraparon por completo a Alexander Rafael Sanoja, quien murió en ese mismo lugar al quemarse el cien por ciento de su cuerpo. El conductor del camión también se quemó casi el 100% y su condición es crítica, en tanto que el mototaxista presentó quemaduras menos graves.
Alexander Rafael fue descrito como un excelente padre. “Trabajaba para sus hijos, su esposa y hasta los sábados y domingo los pasaba en su casa. Él quería salir de esos trancazos y gracias a esos guarimberos ahora mi hijo está muerto”, dijo desconsolada Aura Sánchez.
“Yo quisiera que esa gente dejara ese odio…por eso Alexander ya no está con nosotros. En nombre de la libertad mataron a mi hijo”, comentó sollozando la madre del técnico en refrigeración.
Funcionarios del CICPC iniciaron una investigación sobre esa muerte. El cuerpo de Alexander Rafael Sanoja Sánchez fue entregado este mediodía y sus deudos exigieron que se haga justicia y que de una vez por toda “se acabe tanta agresividad en las calles”.
CORTESÍA DE NOTICIA AL DÍA