Pedro Calzadilla: Bolívar y Chávez abrieron las puertas de un nuevo tiempo
Los ideales comunes y la lucha histórica por lograr la mayor suma de felicidad para el pueblo colocan al Libertador Simón Bolívar y a al líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez, como dos figuras que abrieron las puertas de un nuevo tiempo.
"Dentro de 200 años los venezolanos estarán hablando de Bolívar y de Chávez como dos figuras que abrieron las puertas de un nuevo tiempo", expresó, durante el programa La Pauta de Hoy, que transmite Venezolana de Televisión.
Así lo afirmó este viernes el historiador Pedro Calzadilla, miembro del Centro de Altos Estudios de Pensamiento Hugo Chávez durante el programa La Pauta de Hoy, que transmite Venezolana de Televisión (VTV), al tiiempo que resaltó entre ambos libertadores, existió y quedó como legado la constante necesidad de impulsar proyectos sociales para el beneficio de los más humildes.
Precisó que un asunto que con Chávez le da un vuelco definitivo a la historia de Venezuela, fue gobernar en lealtad con las mayorías, gobernar en lealtad con el proyecto que lo llevó a la Presidencia de la República: el proyecto de los humildes.
"Chávez nos hizo entender que la política debía estar al servicio de la humanidad para garantizar que se viviera en mayor suma de felicidad posible, dicho por Bolívar en el Discurso de Angostura, un texto que recopila el proyecto bolivariano y chavista".
Calzadilla recordó que el compromiso de Hugo Chávez con el pueblo venezolano se comenzó a notar en 1992 cuando, se podría decir, comenzó a liderar una transformación social evidenciada en el cambio del ejercicio de la política, en la relación del mandatario, del líder con su pueblo; en cómo se gobierna y cómo se estructuran las líneas de mando".
Explicó que esa forma de gobernar, que además es legado de Chávez, se centra en el sueño de Bolívar, un modelo por y para los más vulnerables que fue desterrado durante los gobiernos de la Cuarta República y que fue cambiado por uno donde predominaba un sistema capitalista en beneficio de las élites.
"Hay tres cosas que le debemos al comandante Chávez: la unificación popular, el rescate de la idea del socialismo y la integración con nuestra América. Esas tres cosas son el legado que dejó Chávez como herencia para el siglo XXI, lo que lo convirtió como un enemigo número uno para el imperialismo", aseveró.