Venezuela enfrenta sequía histórica
Históricamente en Venezuela se han registrado graves e importantes daños ocasionados por el fenómeno climatológico El Niño.
Intensas sequías han disminuido los niveles de los principales embalses del país, provocando crisis eléctricas que ameritan medidas inmediatas.
En 1905 este fenómeno natural caracterizado por el calentamiento anormal de la temperatura superficial del mar en el océano Pacífico ecuatorial central y oriental, generó una dramática disminución de las precipitaciones en Venezuela.
Sin embargo, en el texto “La hambruna de 1912 y las ánimas de Guasare” escrito por el profesor Jaime Laffaille, se señala que la primera sequía real en la nación ocurrió específicamente entre 1911 y 1912 en la localidad de Paraguaná, estado Falcón, ubicado en la región noroccidental.
Para 1958, le tocó el turno a Caracas atravesar por el período de mayor sequía contado por el maestro Gabriel García Márquez en su obra Cuando era feliz e indocumentado.
En ese año el embalse La Mariposa, que hoy sigue siendo una de las reservas del vital líquido de la capital quedó vacío.
En su crónica Caracas sin agua García Márquez cuenta las drásticas restricciones que ocasionó esta temporada, considerada la peor sequía de toda la historia del país; desde la suspensión total del vital líquido, la paralización de todas las actividades, el perecimiento de animales por causa de la sed, el malestar derivado de las altas temperaturas, la migración de algunos habitantes a ciudades aledañas, hasta la situación de caos y zozobra generalizada que tuvo su fin cuando llegó la lluvia.
Posteriormente, entre 2013 y 2014 Venezuela comenzó a enfrentar el séptimo período más seco durante los últimos 60 años después de los ciclos de sequía vividos en 1972-1979, 1982-1983, 1997-1998 y 2009-2010.
A partir de allí, el Ejecutivo Nacional adoptó un conjunto de medidas para aminorar los efectos del fenómeno El Niño, tales como: la reducción de la jornada laboral, nuevo horario para centros comerciales y prohibición de avisos luminosos.
Este año Venezuela enfrenta una grave emergencia nacional producida por los calores extremos y la sequía que afecta el nivel operativo de la Central Hidroeléctrica Simón Bolívar (Guri) la segunda más grande de América, ubicada en el estado Bolívar.
Los niveles de agua en el referido embalse se encuentran actualmente en una fase crítica lo que genera una deficiencia en la producción que afecta el Sistema Eléctrico Nacional ya que el Guri produce 70% de esta energía.
Por ello, el presidente Nicolás Maduro ordenó el Plan de Administración de Cargas (PAC) que consiste en suspender el servicio por 4 horas por 40 días. Asimismo decretó los miércoles, jueves y viernes no laborables para el sector público y los viernes para la educación inicial, básica y media.
Estas acciones se suman a los constantes a hacer un uso racional y eficiente de los recursos que se resume en el lema: El Niño no es un juego, tómalo en serio.
Motta Domínguez denunció daños en Corpoelec de Zulia
El ministro de Energía Eléctrica, Luis Motta Domínguez, denunció ayer la quema de equipos de un centro de servicio en el estado Zulia, que provocó la destrucción de materiales y vehículos.
A través de su cuenta en la red social Twitter @LMOTTAD escribió: “Anoche apátridas quemaron un centro de servicio en el Zulia, destruyendo material y equipo en perjuicio del pueblo”.
El ministro cuestionó estos actos, pues afirmó que contribuyen a mejorar la situación del sector eléctrico que vive el país.
“¿Ésta es la manera de enfrentar la emergencia eléctrica? Destruyendo material, equipos y vehículos”, señaló.
Agregó que mientras unos construyen, otros destruyen. “¡Viva el que construye y lucha por hacer patria! ¡Fuerza CORPOELEC!”, escribió Motta Domínguez.
