Más de 150 madres adolescentes elaboran pañales ecológicos
Para el proceso de confección las cursantes proceden a cortar las telas según los patrones para pañales y toallas absorbentes, luego ordenan las plantillas cortadas para finalmente colocarles el cierre mágico
Más de 150 madres adolescentes participan en el primer taller para la “Elaboración de Pañales Ecológicos”, el cual se inauguró este jueves en el Centro de Educación Integral Eumelia Hernández, en la parroquia San Bernardino.
La iniciativa que será extendida a otros centros de atención de madres adolescentes, forma parte de las políticas sociales que impulsa el Gobierno del Distrito Capital (GDC) a través de su Fundación de Niños, Niñas y Adolescentes (FNNA) para brindar soluciones y alternativas ante las necesidades generadas por la guerra económica.
La presidenta de la FNNA, Anahí Arizmendi, indicó que la elaboración de los pañales ecológicos apunta a desarrollar proyectos socioproductivos familiares, a un precio más económico y que viene a enfrentar la especulación inducida.
“Es un modelo muy sencillo y fácil de elaborar. Es un pañal con una base removible, fabricado con tela impermeable, lanilla o algodón, goma espuma, ligas y cierres mágicos; además puede ser utilizado por niños y adultos”, comentó Arizmendi.
Explicó que para el proceso de confección las cursantes proceden a cortar las telas según los patrones para pañales y toallas absorbentes, luego ordenan las plantillas cortadas para finalmente colocarles el cierre mágico.
Destacó que el proyecto realizado en conjunto con el Ministerio del Poder Popular para las Comunas, se extenderá a los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap) y las comunidades organizadas.
Arizmendi subrayó que los pañales ecológicos vienen a contrarrestar los efectos ocasionados por los pañales desechables que responden a un mercado marcado por un alto índice de contaminación ambiental, generador del consumismo y especulación.
Dianora de Istúriz, coordinadora para la Prevención del Embarazo en Adolescentes, calificó al taller como una “experiencia extraordinaria” por la creatividad y el proceso de aprendizaje en las madres adolescentes, el cual les permite desarrollar técnicas de emprendimiento y producción.