Activistas realizan viaje de polo a polo para crear conciencia ecológica
El recorrido de polo a polo de dos ingleses tiene un único propósito: generar conciencia sobre los efectos del cambio climático, sobre todo en los más jóvenes.
Treinta y ocho mil kilómetros es la distancia que dos jóvenes activistas ingleses planean recorrer para febrero de 2008, mes en el que esperan culminar el recorrido que han denominado “De polo a polo”, que los llevará del Polo Norte al Polo Sur. Hasta el momento ya han atravesado 14 países y han recorrido aproximadamente diez mil kilómetros, con más de 150 días de viaje.
Navegando, caminando, ayudados por trineos tirados por perros, y utilizando la bicicleta –a la que impulsan como medio de transporte alternativo- Rob Gauntlett y James Hooper se proponen alcanzar su meta únicamente en base a la utilización de energía humana y natural. Planean así dar un mensaje a otros jóvenes de que no es imposible luchar por el objetivo de reducir la contaminación que causa el calentamiento global, y que por más difícil que parezca lograrlo es posible de alcanzar.
“Hemos tenido reacciones maravillosas”, declaró Hooper, de 19 años de edad, al medio Democracy Now. “La finalidad del viaje es intentar involucrar a la mayor cantidad de personas posible, intentar alentar a la gente a que entienda el calentamiento global. En el Ártico el hielo marítimo se ha reducido de hecho un 50 por ciento en los últimos veinte años y su superficie se redujo de un 30 a un 40 por ciento en los últimos diez años. Entonces hay cambios masivos que están teniendo lugar y queremos que la gente sea conciente de ellos”, agregó.
Durante su expedición, Hooper y Gauntlett han sufrido en carne propia los efectos del calentamiento global experimentando varios contratiempos, algunos de ellos de gravedad. En una ocasión, Gauntlett cayó por el hielo golpeándose la cabeza, lo que lo dejó inconsciente. Permaneció varios minutos en el agua congelada antes de que su compañero pudiera sacarlo con la ayuda de un cazador inuit, tras lo cual debió pasar varios días en un hospital.
Recientemente, ambos jóvenes cruzaron la frontera entre Estados Unidos y México, y desde allí planean dirigirse en bicicleta hasta Panamá. Según señalaron, esperan que su viaje termine en la ciudad australiana de Sydney, a comienzos del próximo año.