Nueva York sumergida en la violencia: 352 balaceras y 69 homicidos más respecto al año pasado
Desde la última semana de mayo, la ciudad estadounidense de Nueva York, ha vivido una auge en la violencia armada que no parece tener fin. Puntualmente, la violencia comenzó con el feriado “Memorial Day”, cuando en la práctica arranca el verano en el calendario estadounidense. Y ya suma 12 semanas.
Agrupando esas semanas y comparándolas con el mismo lapso del año pasado, las cifras superan en 352 los tiroteos, en 464 las víctimas y en 69 los homicidios.
Casi cuatro docenas de personas resultaron heridas en balaceras durante el pasado fin de semana. Una de las últimas víctimas fue un hombre de 34 años que recibió un disparo en el pecho en el sector de Brooklyn poco después de las 10:30 p.m. el domingo y murió en el Hospital Brookdale.
El hombre, cuyo nombre no fue revelado, fue abatido cerca de las casas Howard Houses de NYCHA en 280 Stone Ave, Brownsville. Su caso fue el primero de seis tiroteos que, la noche del domingo, cerraron otro fin de semana sangriento, con 35 balaceras y 45 víctimas desde el viernes, según datos del Departamento de Policía de Nueva York. Ello incluye a cuatro hispanos muertos, entre ellos la joven madre Priscilla Vásquez (25).
Cuando se le preguntó ayer sobre la alarmante tendencia, el comisionado Dermot Shea se hizo eco del punto de conversación del Ayuntamiento de referirse al tiroteo como una “tormenta perfecta” este año por la pandemia, el desempleo, la reforma penal y las tensiones raciales y policiales. Pero no ofreció detalles concretos sobre cómo la policía planea frenar el derramamiento de sangre.
“Necesitamos echar un vistazo a dónde nos encontramos ahora porque creo que todos estamos de acuerdo en que realmente no está funcionando”, resumió Shea, quien asumió la jefatura de la policía de Nueva York en diciembre pasado.