El rock retumbó en el Teatro Nacional (Fotos+Video)
Mientras algunos bailaban merengue en la plaza Diego Ibarra, otros rockeaban a menos de una cuadra, en el Teatro Nacional. Desde las 4 pm, el recinto se empezó a llenar para recibir a dos bandas: Tomates Fritos, de Puerto La Cruz, y Los Tres, de Chile.
Como parte de la apuesta del Festival Suena Caracas, el rock sonó ayer por más de dos horas y media. Los nacionales de Tomates Fritos fueron los primeros. La banda se paseó por los temas de su más reciente producción, Hotel Miramar.
“Gracias a todos por venir. Este es nuestro lugar favorito para tocar en el país”, dijo el vocalista Reynaldo Goitía, conocido como Boston Rex.
Un show de luces, un buen sonido y una pantalla de fondo sirvieron para acompañar la presentación. Los portocruzanos aprovecharon para promocionar su nuevo sencillo Te molesta, y repasar temas como Aunque me falle tu querer y Mi cura, mi enfermedad.
“Gracias por ayudarme a cantar. El lunes no podía ni hablar”, admitió el cantante, que a pesar de la gripe no defraudó.
El éxito Granola fue uno de los últimos en sonar, antes de que se despidieran entre coros y con una ovación de pie.
Media hora más tarde, terminaría de estallar el Teatro Nacional. De pie, con aplausos y gritos, recibieron a Los Tres, los internacionales de la noche. Vestidos de negro, los chilenos hicieron su entrada. Hombre de pocas palabras, el vocalista de la banda se dispuso a cantar. Cuatro canciones pasaron hasta que se dejó escuchar: “Buenas noches, Caracas. Un gusto verlos”.
Los Tres ofreció un repertorio amplio. Mas de una docena de temas sonaron en una hora de concierto. Camino, Hojas de té verde, Hey! Hey! Hey! y De hacerse se va a hacer fueron algunas de las canciones coreadas.
“Es un placer visitarlos y venir a hacer que todos bailen y canten”, agregó el vocalista. Así, todos en el público se sumaron en una especie de danza rockera, incluido el presidente de Fundarte, Freddy Ñáñez, que se encontraba en el teatro.
La gente no dudó en pedir temas a gritos hasta que la agrupación dejó la tarima. Henríquez despidió al Teatro Nacional luego de una breve visita a backstage, del que volvió vistiendo una camisa de los Leones del Caracas.
En la plaza. El público en la Diego Ibarra la tuvo más difícil. Pasadas las 5 pm, se presentaron Las Chicas del Can. Una vez que dejaron el escenario, fue el DJ el encargado de amenizar el encuentro. La música electrónica fue la predilecta.
No fue hasta las 7:45 pm, que Omar Enrique, el segundo artista del cartel, llegó a la tarima. Así, el cronograma de la noche mostraba un evidente retraso. A esa hora, aún faltaban por presentarse Kinito Méndez, Fernando Villalona, Bony Cepeda, Elvis Crespo y Wilfrido Vargas.
El público, sin embargo, bailó sin vacilar. El merenguero interpretó sus clásicos más representativos entre elogios a las mujeres. “Feliz de estar esta noche en el acontecimiento de este año, el Suena Caracas. Hoy estoy celebrando 20 años de carrera artística y lo hago con ustedes”, dijo Omar Enrique, quien llevó al público al delirio al compartir escenario con Oscarcito con el tema Corazón fracturado, y luego al interpretar solo la canción Chávez, corazón del pueblo.
FOTOS: Christian Hernández