El Barrio Canaima crece junto a sus árboles (+Fotos)
Un barrio olvidado, que por años sufrió las eventualidades propias de un sector levantado en una zona montañosa, hoy es atendido de forma integral por el Gobierno revolucionario y renace con una nueva fachada que ha traído felicidad y mejor calidad de vida a sus habitantes.
Se trata del barrio Canaima, ubicado en la vertiente oeste del Parque Nacional Waraira Repano, en el sector Lídice de Caracas, donde el poder popular organizado no sólo ha sido testigo de una transformación extraordinaria en su localidad, sino que ha participado de forma activa y protagónica en la recuperación de sus espacios.
"Todas las instituciones hemos venido trabajando como un solo equipo. La parte estructural la maneja la Gran Misión Saber y Trabajo, con gente que ha venido capacitando a los habitantes de esta zona para recuperar escaleras, veredas y terrenos que sirvieron para construir, por ejemplo, un anfiteatro. La parte de friso y pintura es el aporte de Barrio Nuevo, Barrio Tricolor, en un proceso orgánico con el poder popular, y la Misión Árbol que se encarga de la estabilización integral de los taludes y el paisajismo, de la mano de la comunidad", explicó Alejandro Chávez, técnico de apoyo de la Misión Árbol.
Además del anfiteatro, que sirve como lugar de encuentro para los consejos comunales, los habitantes del barrio Canaima restauraron puentes y edificaron lugares destinados a la cultura, el deporte y la sana recreación como una biblioteca, una cancha deportiva y un mirador, bajo la orientación de los trabajadores de Saber y Trabajo.
Rocío Pérez, quien vive en el barrio Canaima desde hace 20 años, recordó las precarias e inseguras condiciones en las que se encontraba el lugar y manifestó su alegría de poder contar actualmente con un hábitat totalmente renovado, que le brinda a ella y a sus hijos la posibilidad de vivir mejor.
"Primera vez que pasa esto aquí y me encanta, estoy feliz y agradecida. Esto antes era horrible por las lluvias y eso, se ponía feo. Uno salía y llegaba allá abajo todo lleno de pantano y así se tenía que ir a trabajar, a menos que se llevara un pañito y otros zapatos para cambiarse. A los niños no los dejaban ni salir, se podían resbalar por cualquier barranco", relató.
Por su parte, la señora Saturna Lander, quien tiene 47 años viviendo en el sector, manifestó que "nunca había visto un beneficio así para el barrio, de parte de ningún gobierno. Esto era cerro, tierra, basura, de todo, porque en ese tiempo nadie se preocupaba por nosotros y así vivíamos".
Con la llegada de Barrio Nuevo, Barrio Tricolor, la casa de la señora Saturna y la de todos sus vecinos fueron restauradas con friso, pintura, puertas, ventanas y, en algunos casos, techos nuevos.
Espacios verdes
Una vez culminada la parte estructural y de embellecimiento, la Misión Árbol comenzó el abordaje para enseñar y apoyar a los residentes de la comunidad a solventar problemas de deslizamientos de tierras y a aprovechar pequeños espacios para la siembra de plantas medicinales, aromáticas y ornamentales.
Nelson Farías, técnico ambiental de la referida Misión, señaló que actualmente se lleva a cabo la siembra de más de 300 tipos de plantas, entre las que destacó el vetiver, que tiene propiedades energéticas; hojas de hígado, utilizada en infusiones para bajar tensión y como antiinflamatorio; verdolaga, que puede crecer hasta 40 centímetros de altura y sirve como condimento; pira, que cuenta con altos contenidos proteicos y vitamínicos; y otras como el tártago y la palma areca que cumple funciones decorativas.
"La idea es concienciar a las personas para que empiecen a cuidar al medio ambiente, porque el medio ambiente es todo lo que nos rodea. Que empiecen a conocer sus plantas, los niños sobre todo, que sepan sus propiedades", resaltó.
Agregó que tienen previstos otros proyectos como la instalación de un establecimiento al que denominarán Café Té Árbol y además se impartirán talleres formativos, para promover estas prácticas.
"Aprenderán a sembrar, cómo hacer el compost (fertilizante compuesto de residuos orgánicos), el humus de lombriz, que es un abono muy importante y con muchos nutrientes y además es agroecológico, para también enseñar que la utilización de agroquímicos es dañino para las plantas y nos envenena. Además hay talleres de plantas medicinales y de fabricación de jabones", detalló.
Con estos trabajos, el barrio Canaima se prepara para ser un lugar turístico y recibir a los visitantes del Camino de los Españoles, un sendero del Waraira Repano, que conecta Caracas con el estado Vargas.
"Por aquí se sube al Camino de los Españoles y atendimos a la comunidad para que tengan sus proyectos socioproductivos, que emprenderán con los conocimientos adquiridos en los talleres y a su vez atenderán cuando vengan los turistas", expresó Farías.