En tiempos de olimpiadas
Los juegos de Río se realizan en medio de un golpe de Estado parlamentario contra la presidenta Dilma Rousseff
En Olimpia, una antigua ciudad de Grecia a orillas del Alfeo, nacieron los juegos olímpicos, allá por el año 776 antes de Cristo y lugar con el más importante templo dedicado a Zeus. En aquellos tiempos, los campeones eran proclamados héroes y ellos ofrecían sus trofeos a esa divinidad suprema de la naturaleza, de la luz y del cielo en la mitología griega. Eran juegos en paz entre los hombres. Las carreras, la lucha, el pugilato, el pancracio y el pentatlón caracterizaron esos juegos.
Modernamente aparecen en Atenas en el año 1896. Lo que hoy estamos viendo en Río de Janeiro es la primera olimpíada en Suramérica. En México (1968) fue la primera de Latinoamérica.
Los juegos de Río se realizan en medio de un golpe de Estado parlamentario contra la presidenta Dilma Rousseff. Pero vale mencionar lo que se dice y decir unas cosas de esa fiesta deportiva, de recuerdos y momentos cruciales. En San Luis, Estados Unidos (1904), se realizó la primera olimpíada de América. Allí se dio también el primer fraude en juegos olímpicos cuando un atleta en maratón bajó de un vehículo tratando de no ser visto para entrar como triunfador al estadio. En las olimpíadas de 1924 de París, el nadador Jhonny Weismuller (¿alguien lo recuerda?) ganó las pruebas de 100 y 400 metros; luego apareció en el cine con su papel de Tarzán. Las olimpíadas de Roma, en 1960, fue el momento de Cassius Clay con su oro en boxeo, convertido luego en una leyenda llamada Muhammad Ali. En México (1968), “Morochito” Rodríguez ganó en boxeo la primera de oro para Venezuela y Silvio Fernández padre fue el abanderado de la selección.En Río lo es otro esgrimista: Rubén Limardo. En las olimpíadas de Montreal (1976) destacaron los cubanos Teófilo Stevenson en boxeo y Alberto Juantorena en atletismo. En esa olimpíada deslumbró con su puntuación perfecta de 10 en gimnasia la rumana Nadia Comaneci, inolvidable. Y así tantas cosas gratas que nos dejan las olimpíadas para rastrearlas siempre en el recuerdo. En Río, Venezuela está presente con 86 atletas y el mejor equipo de esgrima en espada de este continente con Rubén Limardo, actual campeón olímpico, y Silvio Fernández hijo, uno de los mejores del mundo por su técnica y experiencia. Estamos, pues, en tiempos de olimpíadas con la XXXI de Río 2016.
Abogado
/N.A
