Argentina suspendió a Odebrecht por un año
El Gobierno argentino suspendió por un año a Odebrecht como oferente de obras públicas.
Este lunes, el Ministerio del Interior oficializó a través de un comunicado su decisión de retirar por un año de la nómina de oferentes de obra pública a la constructora brasileña Odebrecht.
La empresa cuestionada por su participación en episodios de corrupción, admitida por sus directivos tanto en Brasil como en otros países de la región, no podrá presentarse en los concursos de obras públicas que sean convocadas por el Estado nacional. “A partir de que la empresa sea notificada, y durante el año, no podrá participar de aquellos procesos de contratación que exijan este tipo de certificados”, informó el organismo.
La decisión fue tomada por el Consejo de Registro de Constructores y Firmas Consultoras de Obras Públicas, la cual depende del Ministerio del Interior, dirigido por Rogelio Frigerio. Esta medida surge al considerar que la empresa brasileña está siendo investigada en el pago de sobornos a cambio de licitaciones en varios países.
La constructora había intentado renovar el certificado que le acreditaba el Consejo de Registro de Constructores y Firmas Consultoras de Obras Públicas, que había caducado el 30 junio del 2016. Sin embargo, el Gobierno decidió no renovarle el permiso debido a que se encuentra con varios procesos judiciales y administrativos, tanto en el país como en el exterior.
Según señaló Rogelio Frigerio, en Brasil la empresa tiene causas judiciales con mayor grado de avance, sentencias condenatorias y reconocimiento de culpabilidad de los acusados, en la causa conocida como Lava Jato.
A pesar de que en Argentina todavía no hay sentencia, el funcionario declaró: “Se está en presencia de fuertes y convincentes indicios de la participación de la empresa en prácticas de corrupción, los que resultan incluso de la documentación aportada por la propia empresa”.
Por su parte Odebrecht reconoció ante la justicia de su país el pago de 35 millones de dólares en sobornos a funcionarios argentinos entre 2007 y 2014, para la adjudicación de proyectos de obras públicas.
Se calcula que la compañía pagó unos 3.400 millones de dólares en sobornos y otras operaciones irregulares, un 60 por ciento de esa suma en Brasil y otro 40 por ciento en el exterior, entre el 2006 y el 2014, según declaraciones de un ex ejecutivo de la empresa a jueces brasileños.
