Unasur celebra su día en medio de ataques derechistas
Este viernes se celebra el Día de la Unión de las Naciones Suramericanas (Unasur), mecanismo que ha sufrido una serie de ataques por parte de gobiernos derechistas de la región y de Estados Unidos (EE.UU.), lo cual ha resultado en el debilitamiento del foro político.
Para el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, la Unasur “fortalece la identidad de los pueblos de Suramérica”, mediante la cual se edifica la Patria Grande.
La Asamblea Nacional de Ecuador declaró el 17 de abril como el “Día de la Unión de Naciones Suramericanas”.
Esto en alusión a la Primera Cumbre Energética Suramericana realizada en Isla Margarita, República Bolivariana de Venezuela, el 17 de abril de 2007.
En aquella cita presidencial se decidió que la iniciativa de integración llamada Comunidad Suramericana de Naciones se denominara Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
El objetivo del día se centra en reafirmar la construcción de una identidad suramericana, en los ciudadanos de todos los países miembros y una conciencia favorable al proceso de integración.
Países suspenden su participación
Sin embargo, Gobiernos derechistas llegaron al poder en Brasil, Bolivia, Colombia, Argentina, Chile, Ecuador, Paraguay, Uruguay y Perú suspenden participación en Unasur) y, tras cuestionar el foro de unidad e integración, decidieron suspender su participación en la Unasur.
La victoria del izquierdista Alberto Fernández sobre el derechista Mauricio Macri revirtió la decisión que había tomado Argentina.
El ataque más reciente provino del nuevo Gobierno de Uruguay, encabezado por el derechista presidente Luis Lacalle Pou, cuyo canciller, Ernesto Talvi, anunció el 10 de marzo pasado la salida de ese país de la Unasur.
“Se trata de un organismo regional, basado en alineamientos político-ideológicos y que, en los hechos, ha dejado de funcionar: ya no cuenta con sede y carece de secretaría general operativa”, dijo Talvi.
Agregó que la salida de Uruguay se debe también a que la Unasur ha sido abandonada por la mayoría de los países de la región a excepción de Guyana, Surinam, Venezuela y Argentina.
Intervencionismo de EE.UU.
Los economistas Óscar Ugarteche (de Perú) y Armando Negrete (mexicano), en un artículo publicado en fecha reciente en el sitio web de alinet.org, resaltaron que la constitución de la Unasur “fue motivada por la interferencia abierta de Estados Unidos en la vida política de Bolivia tras tres años de acciones sistemáticas de desestabilización incluyendo un intento de guerra interna, luego que Evo Morales fuera electo presidente”.
Morales y los entonces presidentes de Argentina, Néstor Kirchner, de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, y de Venezuela, Hugo Chávez, “acordaron que lo correcto era organizar un espacio de discusión autónomo que fuera autónomo de la OEA”, por lo que se organizó una reunión en Brasilia, en 2008, donde se juntó por primera vez la Unasur.
Los autores del artículo titulado “¿Qué le pasó a la UNASUR?” mencionaron que “los giros políticos” hacia la derecha en los gobiernos de Argentina (2015), Brasil (2016) y Chile (2017), provocaron que el organismo cayera en “una situación de parálisis institucional”.
En abril de 2018 presentaron su baja temporal e indefinida Argentina (situación que se revirtió con el triunfo de Fernández), Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Perú.
Luego hizo lo mismo Ecuador y el gobierno de facto que tomó el poder en Bolivia tras el golpe de Estado contra Evo Morales, en noviembre pasado, se desvinculó de la Unasur.
Para los economistas Ugarteche y Negrete, la retirada de esos países “se vincula, por una parte, con los diversos mecanismos de presión del gobierno estadounidense contra los esquemas de integración regionales en el tiempo”.