Las sanciones incluyen la congelación de activos y la prohibición de poner fondos a disposición de las personas y entidades incluidas en la lista. Además, una prohibición de viajar, que les impide entrar o transitar por el territorio de la UE.
Restricciones a las relaciones económicas
Las sanciones se centrarán en el comercio desde las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk y desde la UE, en particular, la prohibición de importar bienes desde estas repúblicas, además de restricciones al comercio y a las inversiones relacionadas con determinados sectores económicos, incluyendo la prohibición de suministrar servicios turísticos y la prohibición de exportar determinados bienes y tecnologías.
Restricciones financieras
Se ha decido introducir una prohibición sectorial para financiar a la Federación Rusa, su Gobierno y su Banco Central. Al restringir la capacidad del Estado y el Gobierno rusos de acceder a los mercados y servicios financieros y de capitales de la UE, se pretende «limitar la financiación de políticas escalatorias y agresivas».
Finalmente, la UE asegura que está dispuesta a «adoptar rápidamente sanciones políticas y económicas de mayor alcance en caso de necesidad».
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, anunció este lunes su decisión de reconocer la independencia de las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, tras lo cual se firmaron acuerdos de amistad, cooperación y asistencia mutua entre Rusia y ambas repúblicas.
Putin recordó que actualmente «prácticamente no pasa ni un solo día sin bombardear las localidades del Donbass». «No cesan la matanza de civiles, el asedio, el hostigamiento de personas, incluidos niños, mujeres, ancianos», lamentó, al tiempo que agregó que «el llamado mundo civilizado, del cual los colegas occidentales se autodenominan únicos representantes, prefiere no darse cuenta de esto, como si todo este horror, genocidio, al que son sometidas casi 4 millones de personas, no existiera».