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Trump se corrige tras llamar “animales” a los migrantes

 El presidente de los Estados Unidos (EEUU), Donald Trump, se justifica y asegura que no llamó "animales" a todos los migrantes ilegales, sino a los miembros de la pandilla MS 13, conocida como (Mara Salvatrucha).

"Los medios de fake news dijeron que llamé "animales" a los inmigrantes o inmigrantes indocumentados. ¡No es cierto! Se vieron obligados a retirar, a regañadientes sus historias. Yo me referí a los miembros de la pandilla MS 13 como "animales", una gran diferencia, y es tan cierto. ¡Las Fake News lo entendieron mal a propósito como siempre", escribió en su cuenta Twitter este viernes.

Mientras criticaba a California por sus políticas de inmigración más permisivas que las federales y que otorgan el estatus llamado santuario, porque son más permisivas que las medidas federales; el presidente de EE.UU., Donald Trump, calificó el pasado miércoles a algunas de las personas que cruzan la frontera de forma clandestina desde México como "animales".

"Tenemos a gente que llega al país que ustedes no creerían lo malos que son. Estas no son personas, son animales, pero los estamos sacando del país a un ritmo nunca visto", subrayó Trump, reseñó en esa oportunidad el portal español La Vanguardia.

Las declaraciones de Trump desataron una ola de reacciones de indignación no sólo en Estados Unidos, sino en México, cuyo gobierno presentó ante el Departamento de Estado de Estados Unidos, a través de la Secretaria de Relaciones Exteriores (SRE), una nota diplomática de protesta.

El canciller de México,  Luis Videgaray, afirmó que las declaraciones del presidente estadounidense vulneran el principio fundamental del estado de derecho, y no es sólo una invitación a la violación de las garantías individuales de las personas, sino una incitación al odio, al discurso xenofóbico, reseña este viernes el portal azteca La Jornada.

Para el gobierno de México, una declaración en la que se compara a ciudadanos de cualquier nacionalidad –independientemente de su estatus migratorio y récord legal– con animales, implica una violación a los principios constitucionales, y es una implicación extraordinariamente peligrosa, porque no se reconocen sus derechos humanos, su dignidad, y es incomprensible que un gobierno se sienta en libertad de no respetar estas garantías constitucionales.

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