Sindicalismo español anuncia protestas contra gobierno de Rajoy
Las dos principales organizaciones sindicales de España anunciaron movilizaciones para el 15 y 18 de diciembre ante lo que consideran escasa voluntad del gobierno conservador de Mariano Rajoy de revertir sus regresivas políticas económicas.
El anuncio se produce un día después de que los líderes de Comisiones Obreras (CCOO), Ignacio Fernández Toxo, y de la Unión General de Trabajadores (UGT), José Álvarez, se reunieran con Rajoy y el empresariado para retomar el diálogo social, informó la agencia de noticias Prensa Latina.
Tras ese encuentro, las centrales sindicales se quejaron de la ausencia de un compromiso concreto por parte del Ejecutivo para resolver los problemas de precariedad laboral y desempleo, en un país con la segunda tasa de desempleo más alta de Europa.
Fernández Toxo explicó que la decisión de convocar a estas protestas fue tomada luego de constatar los "límites" impuestos por el gobierno a las negociaciones para buscar una solución a la falta de empleo, los bajos salarios y la pobreza que sufre la sociedad española.
En declaraciones a la prensa en la ciudad de Zaragoza, lamentó que la administración del derechista Partido Popular (PP) viva en una ‘realidad paralela’.
Denunció que el PP desconoce la existencia de una pobreza laboral, en la cual los sueldos míseros son la tónica general y hay una importante brecha salarial entre hombres y mujeres, como consecuencia de una legislación del trabajo que exigió derogar.
En su encuentro con los secretarios generales de CC.OO. y la UGT, Rajoy puso dos líneas rojas sobre la mesa: la estabilidad presupuestaria comprometida con la Unión Europea y la impugnada reforma laboral aprobada por su gobierno en 2012.
El líder de la UGT, José Álvarez, también lamentó que en esa reunión apenas se produjera un diálogo sin que se concretaran las propuestas demandadas por los dos sindicatos mayoritarios.
A su juicio, existe margen de maniobra para hacer cambiar las políticas del PP si ambas centrales son capaces de "tomar las calles", para lo cual pidió el apoyo de los partidos de izquierda y de la ciudadanía.
Álvarez emplazó al Ejecutivo a acabar con el fraude fiscal en España y crear un impuesto especial para las grandes fortunas que contribuya a cumplir con las expectativas de déficit fijadas por Europa, en lugar de hacer recaer el peso de sus medidas en la clase trabajadora.
"El diálogo por sí mismo no tiene valor sin que se concreten las conclusiones", destacó el dirigente.
Los partidos Socialista Obrero Español y Podemos, segunda y tercera fuerzas parlamentarias de este país, reconocieron el nivel de frustración de las agrupaciones sindicales y respaldaron su convocatoria a movilizaciones y manifestaciones en diciembre.
