Santos ratifica necesidad de la paz ante nuevo episodio de violencia
El hecho ocurrió durante un operativo militar en el sector la Esperanza del municipio de Buenos Aires, en el Cauca, donde un batallón fue "atacado", según voceros del Ejército colombiano, por una columna de las Farc
Frente a los hechos ocurridos entre la noche del martes y la madrugada del miércoles en el departamento del Cauca, Colombia, en el que resultaron muertos 11 militares colombianos, el presidente de esa nación, Juan Manuel Santos, ratificó la necesidad de poner fin a la guerra que vive ese país desde hace más de 60 años.
"Lamento muerte de soldados en Cauca. Esta es precisamente la guerra que queremos terminar", escribió su cuenta en Twitter el jefe de Estado colombiano, comprometido con las negociaciones de paz que -en medio del conflicto armado- llevan adelante el Gobierno y la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, en La Habana, Cuba.
De acuerdo con el diario colombiano El Tiempo, además de los 11 fallecidos (10 soldados y un suboficial) resultaron heridos 20 efectivos más.
El hecho ocurrió durante un operativo militar en el sector la Esperanza del municipio de Buenos Aires, en el Cauca, donde un batallón fue "atacado", según voceros del Ejército colombiano, por una columna de las Farc.
El presidente Santos informó que en las próximas horas viajará hasta la zona donde ocurrió el lamentable suceso, tras culminar una reunión con jefes militares. "Estamos con cúpula militar precisando circunstancias de los hechos", escribió en twitter.
El departamento colombiano del Cauca ha sido escenario durante los últimos años de intensos conflictos, no sólo entre el Ejército colombiano y grupos insurgentes, sino también entre fuerzas de seguridad y organizaciones indígenas y campesinas.
El pasado 28 de febrero, en nota reseñada por Telesur, se conocieron las denuncias realizadas por la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) sobre las arremetidas por parte del Escuadrón Móvil Antidisturbios en protestas realizadas en zona rural del municipio de Caloto (Cauca), cuando los indígenas protestaban por recuperar las tierras que injustamente les fueron arrebatadas.
Durante décadas, el conflicto entre el ejército y las fuerzas insurgentes ha sumergido a Colombia en una profunda guerra que se ha tratado de mermar con mayor intensidad desde la instalación de una mesa de diálogo en la isla de Cuba entre el Gobierno y Farc para establecer un cese al choque armado.
Estos avances en la búsqueda de mecanismos para poner fin a una era violenta, fue mencionada por el Presidente Juan Manuel Santos durante su intervención en la VII Cumbre de las Américas, en Panamá, donde afirmó: "Nos falta terminar un conflicto armado anacrónico que nos ha desangrado por más de medio siglo".
En ese mismo derecho de palabra el mandatario afirmó que "hoy tenemos una mesa de negociación en Cuba, que ha avanzado en acuerdos de fondo como nunca antes".
Por su parte, el martes la delegación de las Farc que participa en las conversaciones de paz con el Gobierno insistió en la necesidad de hablar sobre el cese al fuego bilateral.
