ONU y senadores de EE. UU. condenan ataque militar en el Caribe y exigen respeto a la ley

La reciente intervención de un grupo de senadores de Estados Unidos y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha puesto en el centro del debate la legalidad del ataque militar del 2 de septiembre de 2025 en el mar Caribe, que dejó 11 muertos. La ONU ha instado a EE. UU. a «cesar su guerra sin ley», recordando que el uso unilateral de la fuerza es ilegal bajo la Carta de las Naciones Unidas y subrayando la importancia de respetar los principios del derecho internacional. Los senadores, entre ellos Tim Kaine y Jack Reed, han expresado su alarma ante la falta de un proceso judicial y la ausencia de pruebas que justifiquen estas acciones.
En su carta al presidente Donald Trump, cuestionan la base legal del ataque y resaltan que clasificarlo como una operación de contraterrorismo no otorga autoridad para atacar y matar civiles. Exigen respuestas sobre la identidad de las víctimas y si existieron alternativas para evitar el uso de la fuerza letal. Organizaciones de derechos humanos y analistas internacionales han advertido sobre el peligroso precedente que estas acciones podrían sentar.
La ejecución de individuos sin un debido proceso no solo representa una regresión en las relaciones internacionales, sino que también pone en riesgo la estabilidad de la región. La falta de transparencia en estas operaciones ha suscitado serias preocupaciones sobre la legalidad de las acciones estadounidenses y su impacto en la soberanía de las naciones latinoamericanas.
La situación ha llevado a un creciente número de naciones caribeñas y latinoamericanas a condenar las acciones de EE. UU., acusándolo de transformar el Caribe en una «zona de ejecuciones sumarias». La ONU ha reiterado su llamado a la administración Trump para que cumpla con el derecho internacional y se abstenga de acciones que puedan desestabilizar aún más la región.



