Durante el Consejo Nacional de Economía, el presidente de la República, Nicolás Maduro, afirmó que “Venezuela tiene que tener una economía que supere la dependencia definitiva de la renta petrolera que hemos tenido durante 120 años” y aseguró que el país está en condiciones de lograrlo. Este mensaje resalta la necesidad de un cambio estructural en la economía venezolana, tradicionalmente marcada por su dependencia de los hidrocarburos.
Maduro enfatizó que la riqueza generada por los recursos petroleros debería servir como palanca para el desarrollo, en lugar de ser la única fuente de ingresos del país. “Venezuela puede y debe ser parte de la ecuación energética mundial”, dijo, al tiempo que subrayó la importancia de alcanzar una independencia económica respecto a estos recursos.
El mandatario hizo un llamado a la juventud, empresarios y trabajadores para construir un futuro en el que Venezuela sea un país autosustentable e independiente. Propuso un modelo económico nuevo que busque asegurar un desarrollo multifacético, permitiendo al país producir sus propias divisas y riquezas. “Venezuela tiene que diversificar los ingresos petroleros y construir una nueva economía que genere riquezas adicionales”, precisó.
Además, Maduro destacó la necesidad de revisar y renovar los acuerdos comerciales existentes, señalando que muchos de ellos no han sido beneficiosos para el país. Según él, es crucial adaptar estos acuerdos a la nueva etapa que enfrenta Venezuela. En cuanto a la opinión pública, sugirió abrir espacios para debatir temas relevantes para el desarrollo nacional, dejando atrás conflictos y mentiras que no contribuyen al bienestar del país.
Finalmente, el presidente reafirmó su compromiso con un camino hacia una nueva economía: “Vamos por el camino correcto, un camino hacia una economía que trascienda la dependencia histórica de la renta petrolera”, concluyó, abriendo posibilidades para un desarrollo sostenible y estructural en beneficio de todos los venezolanos.
