Familiares de la líder indígena asesinada Berta Cáceres exigen justicia
Este sábado se llevó a cabo el entierro de la líder indígena de Honduras, Berta Cáceres, quien fue asesinada el pasado jueves en su casa, ubicada en la ciudad hondureña La Esperanza.
Durante el sepelio realizado en la ermita La Gruta, los familiares y amigos de la víctima despidieron a Cáceres, quien desde muy joven comenzó su ardua defensa por los recursos naturales de La Esperanza, y por los derechos de la comunidad indígena Lenca de Honduras.
Al entierro asistieron seguidores de diferentes naciones, así como el expresidente de esa nación, Manuel Zelaya, quienes junto a sus familiares exigieron justicia y dieron un contundente "no" a la impunidad, refiere un despacho de la agencia Efe.
"Queremos pedir que se haga justicia y que este crimen horrendo no quede en la impunidad (…) Sabemos con certera claridad que los motivos de su vil asesinato fueron su resistencia y su lucha en contra de la explotación de los bienes comunes de la naturaleza y en defensa del pueblo lenca", dijeron sus hijos.
Asimismo, pidieron que se esclarezca el crimen y se encuentren a los responsables del crimen, por el que responsabilizaron a la empresa Desa-Sinohydro, que pretende llevar a cabo un proyecto hidroeléctrico en la comunidad de Río Blanco, departamento occidental de Intibucá.
Además, responsabilizaron al Estado de Honduras por no prohibir la iniciativa de la empresa, que ocasionaría graves daños al ambiente de esa zona.
Cáceres fue una reconocida activista en su nación y a nivel internacional. Fundó el Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh), y en 2015 recibió el Premio Medioambiental Goldman por su lucha en la defensa de los recursos naturales en su nación.