Evo no es el primero: ¿a quién ha dado México protección a lo largo de la historia?
México ofreció asilo a Evo Morales el 10 de noviembre después de que el presidente de Bolivia presentara su renuncia. El líder boliviano no es, sin embargo, la primera figura de destaque mundial que busca protección en este país.
"México se ha caracterizado por su tradición en materia de protección a asilados a lo largo de su historia. Se ha mostrado como un Estado incluyente y solidario cuyas puertas han estado abiertas para quienes han tenido la necesidad de abandonar sus países", reza el comunicado de la Cancillería mexicana acerca de la concesión de asilo a Morales.
México es un país con una larga historia de asilo y refugio. El país dio nuevo hogar a españoles al fin de su guerra civil en la década de 1940 y a ciudadanos que huían de las diversas dictaduras latinoamericanas en las décadas de 1970 y 1980. Además, México ha proporcionado protección a perseguidos políticos en sus Embajadas alrededor del mundo en distintas ocasiones.
A mediados de octubre, el Gobierno de México anunció que proporcionó asilo a seis personas relacionadas con la Asamblea Nacional de Ecuador en su Embajada en Quito, en el marco de la crisis política que atraviesa el país suramericano. Días antes, el 12 de octubre, México ya había acogido a la asambleísta ecuatoriana Gabriela Rivadeneira en la misión diplomática.
Al comunicar que México le daría asilo a Evo Morales, el canciller mexicano Marcelo Ebrard, recordó "que México ha sido tierra de asilo a personajes como Giussepe Garibaldi, José Martí o Víctor Raúl Haya de la Torre". A seguir, Sputnik te cuenta más acerca del exilio de esas y otras personalidades en tierra mexicanas.
Giuseppe Garibaldi
Garibaldi fue uno de los líderes de la unificación de Italia y es considerado hasta el día de hoy un héroe en el país transalpino. Sin embargo, quien llegó a México en abril de 1911, fue su nieto Giuseppe Garibaldi II, apodado en el país latinoamericano de Peppino Garibaldi. El militar italiano alcanzó el rango de general en México, fue nombrado jefe de la llamada Legión Extranjera, y participó en la Revolución mexicana.
José Martí
El escritor y político cubano José Julián Martí Pérez estuvo exilado en México por poco más de dos años a finales del siglo XIX, después de ser deportado a España y vivir brevemente en París y Nueva York. Fue en México donde conoció a Carmen Zayas Bazán Hidalgo, en 1875, quien se convertiría en su esposa dos años más tarde.
Víctor Raúl Haya de la Torre
El líder del Partido Aprista Peruano emigró a México en 1922, después de ser desterrado por el entonces presidente del país, Augusto Leguía. Fue en México, donde cerca de dos años más tarde fundó la Alianza Popular Revolucionaria Americana (APRA), uno de sus mayores legados.
León Trotski
Después de huir con su esposa a Noruega, el revolucionario soviético León Trotski obtuvo, con ayuda del muralista Diego Rivera, el permiso del entonces presidente Lázaro Cárdenas para refugiarse en México. El asilo le fue concedido a Trotski con la única condición de no interferir en los asuntos internos del país norteamericano.
Rigoberta Menchú
La líder indígena guatemalteca Rigoberta Menchú necesitó exiliarse en México después de que denunciara la sistemática violación de los derechos humanos de los campesinos indígenas en el país. Su labor por la defensa de los pueblos originarios le rindió el Premio Nobel de la Paz en 1992.
Héctor José Cámpora
El expresidente argentino Héctor José Cámpora solicitó asilo en la Embajada de México en el país rioplatense la noche del golpe de Estado de 1976. El político residió en la representación diplomática cerca de tres años. A finales de 1979, la dictadura argentina le permitió, debido a su frágil condición de salud, exiliarse en México, donde falleció poco más de un año más tarde.