Antiguamente, a los niños se les obsequiaba con algún libro que pudiera ayudarles con el salto a un nuevo curso. La escuela católica St. Cornelius en Chadds Ford, Pennsylvania, ha querido modernizarse ajustándose a los nuevos tiempos. Los niños recibieron un estupendo escudo antibalas.
Al parecer, una clase de estudiantes de octavo grado que se graduó de la escuela secundaria recibió dichos escudos a prueba de balas como regalo para prepararlos ante posibles tiroteos masivos cuando lleguen a la escuela secundaria. Además, los escudos tienen un tamaño perfecto para colocarlos en sus mochilas.
Según su fabricante, los escudos protegerían a los estudiantes de los ataques con pistolas y escopetas si reciben disparos por la espalda. Teóricamente también, podrían protegerlos si sostuvieran los escudos frente a sus cuerpos, tal y como hace el Capitán América.