En San Antonio se llena el tanque de gasolina rapidito (+Fotos)
Los usuarios logran surtir de combustible en minutos y sin colas
La gran diferencia tras el cierre de la frontera en los seis municipios con Estado de Excepción en el Táchira lo representan las gasolineras, cuyos usuarios logran surtir de combustible en minutos, una mejora comparada a las largas colas que solían realizar antes de las acciones militares desplegadas desde hace más de una semana.
En San Antonio hay cuatro gasolineras, una de ella la llamada Estación 56, ubicada en el sector Pueblo Nuevo, destinada exclusivamente a taxistas, mototaxistas y cualquier unidad de transporte que circule por la ciudad.
"Las líneas organizadas -con unos 660 vehículos registrados- podemos cargar diariamente 50 litros de gasolina. Antes podíamos durar de tres a cinco horas haciendo una cola, ahora lo estamos haciendo en menos de diez minutos", destacó Jesús Sánchez, miembro de la Cooperativa Divino Niño Bolivariano.
Otras dos gasolineras son La Esperanza y la Pdvsa Bella Vista, que surten a particulares y en el caso de la segunda, también a camiones. Suelen acudir entre días: lunes, miércoles y viernes para un grupo; martes, jueves y sábados para el otro, según su número de placa.
Usuarios consultados coincidieron que ha sido esta la gran mejora desde el cierre de la frontera.
La cuarta bomba en San Antonio se trata del expendio de combustible fronterizo Safec, la gasolinera internacional, que solía surtir a los vehículos provenientes de Colombia que no tenían el respectivo chip que determina a quien le toca ese día. El precio solía ser más caro. Actualmente se encuentra cerrada al no haber libre tránsito por el puente Internacional Simón Bolívar.
Según estimaciones oficiales, Venezuela se estaría ahorrando un millón de litros de combustible que antes pasaban de manera ilegal hasta Cúcuta, donde era comercializado a los vehículos mediante vendedores informales.
Lo que más lamentan los transportitas de San Antonio es no poder llevar a colombianos que se dirigen a su país, y viceversa, tras el cierre de la frontera.
"La clientela se ha limitado a personas que transitan por la ciudad, que a su vez son muy pocas. Los que iban al aeropuerto de Santo Domingo también solían ser los colombianos. El trabajo ha disminuido al menos en un 70%" refirió Juan Correa, mototaxista de la línea Centro Cívico San Antonio.