El Vaticano implementa medidas tecnológicas sin precedentes para proteger el cónclave
El Vaticano se prepara para el cónclave que comenzará el 7 de mayo de 2025, implementando un despliegue tecnológico sin precedentes en la Capilla Sixtina, con el fin de garantizar la seguridad y la confidencialidad del proceso electoral del próximo sumo pontífice. Según informa el diario italiano Corriere della Sera, un equipo de técnicos especializados ha trabajado arduamente para convertir este histórico recinto en una zona hermética desde el punto de vista informático.
Las medidas adoptadas incluyen bloqueadores de frecuencia, conocidos como jammers, que impiden que dispositivos como celulares y aparatos Bluetooth o WiFi emitan o reciban señales. Además, se han instalado películas protectoras anti-drone y anti-láser espía, diseñadas para bloquear intentos externos de captar imágenes o sonidos. Expertos en contramedidas electrónicas también han realizado un exhaustivo barrido del lugar en busca de micrófonos ocultos.
Cada cardenal elector deberá entregar sus dispositivos electrónicos antes de ingresar a la Capilla Sixtina, lo que incluye celulares, laptops y relojes inteligentes. Para asegurar el aislamiento físico del sistema informático, este estará desconectado de Internet y los servidores se reubicarán en zonas seguras como la Biblioteca Apostólica Vaticana. Además, la Gendarmería Vaticana ha activado una red de radio encriptada con cifrado militar para uso exclusivo del personal autorizado.
Para reforzar estas medidas, la Santa Sede ha recurrido a empresas privadas extranjeras como Cip y Radure, así como a la colaboración de la Agenzia per la Cybersicurezza Nazionale (ACN) de Italia. Estas entidades coordinarán el intercambio de información crítica y garantizarán una respuesta rápida ante posibles ciberataques.
Las acciones tomadas responden a experiencias previas de ataques cibernéticos sufridos por el Vaticano en 2022 y 2024, que pusieron de manifiesto su vulnerabilidad tecnológica. Con estas nuevas estrategias, el Vaticano busca asegurar un cónclave seguro y libre de interferencias externas.
