El Papa Francisco invita a la esperanza y fraternidad en el Jubileo 2025
A pocas horas de la inauguración del Jubileo de 2025, el Papa Francisco compartió un profundo mensaje de esperanza y fraternidad en su último discurso del año 2024. Este evento eclesial, que se extenderá hasta el 6 de enero de 2026, espera atraer a más de 30 millones de peregrinos a Roma. En su reflexión, el pontífice subrayó que “la esperanza de un mundo fraterno no es una ideología, no es un sistema económico, no es el progreso tecnológico”, sino que se encuentra en Jesús.
El Papa enfatizó que “la esperanza de un mundo fraterno es Él, el Hijo encarnado, enviado por el Padre para que todos lleguemos a ser lo que somos: hijos del Padre que está en los cielos y, por tanto, hermanos entre nosotros”. Esta perspectiva invita a los fieles a reconocer la importancia de vivir como una verdadera familia humana.
Francisco también instó a los presentes a realizar una “obra decisiva” al permitir que Dios transforme en ellos todo lo que no es digno de un hijo. “Me comprometeré, cada día, a vivir como hermano y hermana de mi prójimo”, reflexionó con fervor. En este contexto, hizo hincapié en la necesidad urgente de cultivar un mundo fraterno donde todos puedan coexistir con dignidad y respeto mutuo, independientemente de sus diferencias.
La celebración del 31 de diciembre también fue significativa para el Papa, quien participó en las primeras vísperas de la solemnidad de Santa María, Madre de Dios. En esta ocasión especial, Francisco ofreció un Te Deum en acción de gracias por el año que concluye y aprovechó para enviar un mensaje directo a la ciudad de Roma en el marco del Jubileo.
Con su llamado a la fraternidad y la esperanza, el Papa Francisco busca unir corazones, recordando que la verdadera transformación comienza en nuestro interior.
