EEUU podría retirarse del Consejo de Derechos Humanos de la ONU
La portavoz de EEUU ante la ONU, Nikki Haley, declaró la semana pasada que Washington tomaría la decisión sobre su membresía en el Consejo después de la sesión que se celebrará este mes de junio en Ginebra
Estados Unidos(EEUU) pretende señalar este 6 de junio durante la 35 sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU que puede retirarse del organismo a menos de que se introduzcan reformas para eliminar “prejuicios en contra de Israel”, informa Reuters, citando a diplomáticos y activistas.
La portavoz de EEUU ante la ONU, Nikki Haley, declaró la semana pasada que Washington tomaría la decisión sobre su membresía en el Consejo después de la sesión que se celebrará este mes de junio en Ginebra. En una entrevista con el canal CBS, Haley destacó que pretende anunciar que “si EEUU va a formar parte del Consejo de Derechos Humanos, el Consejo tiene que tener credibilidad”.
Además, en un artículo en el diario ‘The Washington Post’, Haley escribió que entre otras cosas, la membresía en el Consejo “debe ser determinada a través de votación” para “no permitir que los peores abusadores de los derechos humanos logren escaños”. La portavoz también subrayó que el Consejo “debe poner fin a su práctica de distinguir erróneamente a Israel para críticas”.
Haley ha señalado que el Consejo aprobó más de 70 resoluciones en contra de Israel, un país “con un fuerte registro de derechos humanos”, mientras que tan solo siete resoluciones fueron aprobadas en contra de Irán, un país “con un pésimo registro de derechos humanos”.
La posible salida de EEUU del Consejo ha provocado alarmas entre los aliados occidentales y los activistas. En particular, ocho grupos, entre ellos la ONG Freedom House y el Instituto Jacob Blaustein, escribieron a Haley el pasado mes de mayo que la retirada sería contraproducente, ya que podría llevar al Consejo a “enfocarse injustamente en Israel en un grado más alto”.
En la carta enviada por los activistas se señaló que durante el boicot por parte de EEUU el desempeño del Consejo sufrió “en términos de tratar a los peores infractores del mundo y hacia los prejuicios antiisraelíes”.
Washington estuvo boicoteando el cuerpo de la ONU durante tres años bajo la presidencia de George W. Bush, antes de volver a unirse bajo el expresidente Barack Obama en el 2009.