Disolución de USAID por parte del gobierno de Trump genera reacciones múltiples

La administración de Donald Trump ha tomado la decisión de disolver formalmente la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), a pesar de un reciente fallo de un juez federal que consideró inconstitucional este cierre unilateral. Según el portal de noticias Axios, esta medida se comunicó al Congreso, indicando que las funciones de USAID se trasladarán al Departamento de Estado, o serán eliminadas si no se alinean con las políticas del presidente.
A partir del 1 de julio, ciertas responsabilidades de USAID serán delegadas al Departamento de Estado. Este cambio ha llevado a que los empleados reciban notificaciones sobre la eliminación de sus puestos, programados para julio y septiembre, lo que ha generado preocupación en el ámbito laboral.
El Secretario de Estado, Marco Rubio, defendió la acción, afirmando en un comunicado que “seguimos adelante con programas esenciales que salvan vidas y estamos realizando inversiones estratégicas que fortalecen a nuestros socios y a nuestro propio país”. Por su parte, la portavoz del Departamento de Estado, Tammy Bruce, destacó que los programas de asistencia exterior se reorientarán para alinearse con lo que consideren mejor para Estados Unidos y sus ciudadanos.
Bruce también agregó que no estaba claro si todos los funcionarios del servicio exterior serían despedidos y aseguró que los cambios en USAID no afectarían la capacidad del Equipo de Respuesta a Desastres de la agencia. Sin embargo, la disolución ha suscitado críticas y preocupaciones sobre el futuro de la asistencia humanitaria en el país.
La controversia se intensificó cuando Elon Musk se pronunció sobre la organización, etiquetándola como corrupta y derrochadora.