Casi 6 mil mercenarios se unieron a grupos terroristas en Siria e Irak
Los militantes provienen de más 50 países, según la última investigación de la Policía Internacional
Al menos cinco mil 800 mercenarios extranjeros se han unido a grupos terroristas que operan en Siria e Irak, según la identificación que realizó la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol).
El jefe de la Interpol, Jurgen Stoke, informó que recientemente registraron más de 25 mil ciudadanos en las filas de los grupos extremistas armados procedentes de más de 50 países, por lo que pidió mayor cooperación de las naciones miembros de la policía en la lucha antiterrorista.
Stoke enfatizó en la necesidad de que los países transmitan la información que se logre acumular en cada territorio. Destacó que Interpol es la mayor organización de policía internacional, con 190 países miembros, creada en 1923.
Otros organismos de inteligencia calculan que son 100 mil los mercenarios extranjeros infiltrados por las fronteras sirias con Turquía, Líbano y Jordania, para engrosar las filas del grupo terrorista Estado islámico (EI), el Frente al-Nusra (brazo armado de Al-Qaeda), y los que conforman la llamada “oposición moderada”.
En Junio de 2015, la Interpol identificó a cuatro mil extremistas extranjeros en Siria, cifra contrastada con los menos de 900 combatientes extranjeros habían sido identificados por Interpol.
Hoy, menos de un año después, más de cuatro mil perfiles están disponibles en nuestra base de datos", detalló Stock, en Barcelona, España, desde donde ha impulsado la cooperación en la lucha antiterrorista entre diferentes cuerpos de seguridad adscritos al organismo policial.
Stock ofreció esas declaraciones ante más 150 representantes de 41 países en la inauguración de la V Reunión de Trabajo Internacional sobre Lucha Antiterrorista que se celebra en la Torre Agbar de Barcelona (España) y abordó lo concerniente a los combatientes terroristas extranjeros.
Según las Naciones Unidas, la cifra de extranjeros que se han unido a grupos terroristas, sobre todo al autodenominado Estado Islámico (EI), creció un 70 por ciento entre mediados de 2014 y marzo de 2015.
El Estado Islámico intenta esparcir el terrorismo por Europa y ha amenazado con extender sus ataques a Rusia y Estados Unidos (EE.UU.).