Canciller Guillaume calificó de histórica la visita de Xi Jinping al Ecuador
El canciller de Ecuador, Guillaume Long, calificó este martes de ‘histórica’ la visita que realizó a este país el presidente chino, Xi Jinping, los días 17 y 18 de este mes, y señaló que es resultado de la política exterior soberana de este país andino y de su inserción “en forma diferente” en el mundo.
“Es una visita histórica. No habíamos tenido una visita de Estado de esa naturaleza en la historia del país”, remarcó en entrevista con la Radio Pública ecuatoriana.
El jefe de la diplomacia ecuatoriana señaló que esta es una visita “de altísimo nivel” y es cosecha de 10 años de acercamiento con China, adonde el presidente Rafael Correa arribó en 2015 y asistió a la declaración de “relación estratégica”, privilegio con el que cuentan pocos países en la región y el mundo.
Explicó que esa designación, que se ratificó con la presencia del mandatario chino en Quito, significa que se ha elevado el nivel de la relación bilateral en un sinnúmero de ámbitos y con una mayor cercanía, según el código establecido.
Refirió que el nexo con China no reprimariza la economía nacional ecuatoriana porque no se trata solamente de promover las exportaciones hacia el gigante asiático; trasciende el círculo vicioso de las materias primas y del patrón de acumulación primario-exportador del cual Ecuador pretende alejarse.
“La relación con China, a través de financiamiento, a través de inversión, también a través de temas comerciales, ha servido mucho para nuestro propósito de cambiar nuestra matriz productiva y de cambiar nuestro rol en la división internacional del trabajo, de acercarnos poco a poco a una economía que se basa más en el conocimiento, en servicios, en industria”, indicó.
Consideró que la visita del Presidente chino “es una señal muy potente hacia adentro, también hacia China” de que la relación con Ecuador “va en serio” y va a profundizarse.
Dijo que durante las conversaciones oficiales, Ecuador expuso temas relativos a la balanza comercial frente a una economía altamente competitiva. “No queremos inundarnos de productos chinos que vayan a afectar industrias importantes para nosotros que generan empleo”, añadió.
También se abordó el tema de la cooperación y la cooperación no reembolsable, en virtud de la cual China anunció que entregará 150 millones de dólares para la reconstrucción en la zona impactada por el terremoto de abril pasado, y en particular dialogaron de la refinería del Pacífico “que avanza bien”; resaltó la entrada en funcionamiento a toda capacidad -en presencia de ambos mandatarios- de la hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, una de las que se construyen en el país con la cooperación china.
Long precisó que una de las facetas en la relación con China es la complementariedad, con un interés de ‘ganar-ganar’ para las partes, siendo un país que se considera “en vías de desarrollo” y con grandes retos pendientes hacia lo interno, pero con gran liquidez y voluntad de apoyar a otros países, a la vez que genera una tasa de retorno, pero “con un trato diferente que uno recibe de otras grandes potencias”.