Argentina fabricará otros ocho satélites
La presidenta de Argentina, Cristina Fernández, anunció que su país desarrollará y fabricará otros ocho satélites, como parte de una política de Estado de fomento tecnológico, para lo cual enviará al Congreso un proyecto de nueva ley satelital.
La mandataria hizo el anuncio después del lanzamiento exitoso del Arsat-2 de telecomunicaciones desde el Centro Espacial de Kourou, Guayana Francesa, que significa -dijo- un orgullo para todos los argentinos y un homenaje para el expresidente Néstor Kirchner.
"Fue Néstor quien recuperó las órbitas en los 81 grados oeste y 72 grados este para el país", recordó la estadista.
Fue el finado mandatario quien recuperó las órbitas satelitales argentinas y en 2006 promulgó una ley para la creación de la empresa ARSAT, a cuyo sostén y desarrollo dedicó inversiones públicas y gracias a esa política de estímulo científico hoy el país puede -resaltó- fabricarlos.
Hablando en cadena nacional, Cristina Fernández aseguró que enviará al Congreso el anteproyecto de la Ley de la Industria Satelital Argentina para resguardar lo logrado en este campo hasta ahora en estos 12 años y garantizar, como política de Estado, continuar progresando en esta importante esfera.
Esa Ley -señaló- tiene tres objetivos básicos: uno, declarar de interés público la política de desarrollo satelital, para evitar que este progreso sea vendido por gobernantes de turno y pare en manos privadas o posiblemente extranjeras.
El segundo radica en delinear el Plan de Desarrollo Satelital 2015-2035 que incluye la fabricación de otros ocho sensores cósmicos con inversiones públicas garantizadas y, tercero, establecer que la empresa Arsat sea la que gestione la comercialización y beneficios de esta tecnología.
Con esta iniciativa a la que se proyecta una inversión de mil 201 millones de dólares "queremos perpetuar por ley el desarrollo satelital del país como política de Estado a través de una empresa argentina", recalcó Cristina Fernández.
Con ella -explicó la dignataria-, se persigue proteger las posiciones geostacionarias que pertenecen a Argentina, garantizar el fomento tecnológico, así como alcanzar la rentabilidad y lograr la sostenibilidad de esta industria y generar demanda y brindar ofertas.
En este punto -señaló- que se transferirá la potestad sobre la banda G4 a la empresa Arsat para que sea ella la que gestione su comercialización y control.
Reiteró que para evitar que Arsat pare en manos privadas, se prohibió que se vendan las acciones tipo A de esa empresa sin la aprobación de dos tercios del Congreso.
"Con ello queremos evitar que todo este patrimonio tecnológico que pertenece a los 40 millones de argentinos pase a manos de unos pocos y probablemente manos extranjeras", insistió.
"El futuro lo vimos hoy despegar, y en el Congreso lo vamos a institucionalizar", concluyó la presidenta argentina.
