Agenda violenta de la MUD se mantiene apoyada por EE.UU.
En lo que va de año el Estado norteamericano ha producido 105 acciones y declaraciones hostiles en contra de Venezuela
La llamada Mesa de la Unidad Democrática (MUD) persiste en continuar impulsando una agenda violenta en las calles del país bajo la complicidad y respaldo del gobierno de los Estados Unidos, como estrategia para derrocar el gobierno constitucional y legítimo del presidente de la República, Nicolás Maduro, y así generar zozobra en las calles del país.
Así lo denunció este domingo el reconocido periodista venezolano y director del diario Últimas Noticias, Eleazar Díaz Rángel, en su columna semanal Los Domingos de Díaz Rangel, espacio en el que recordó que en lo que va de año el Estado norteamericano ha producido 105 acciones y declaraciones hostiles en contra de Venezuela, de acuerdo al último informe de la Cancillería de la República.
En ese contexto, se refirió a la articulación que existe entre la oposición venezolana y factores políticos y militares de EEUU, como el Comando Sur, sumado al impulso de la guerra no convencional para quebrantar la paz del país.
Como evidencia mencionó los informes regulares del almirante Kurt Tidd ante la comisión de servicios armados del senado estadounidense, donde se revela que el Comando Sur mantienen una agenda común y observación permanente para promover acciones callejeras armadas en complicidad con la coalición opositora.
"Con los factores políticos de la MUD hemos venido acordando una agenda común, que incluye un escenario abrupto que puede combinar acciones callejeras y el empleo dosificado de la violencia armada bajo un enfoque de cerco y asfixia.
También hemos acordado con los socios más cercanos de la MUD, utilizar la Asamblea Nacional como tenaza para obstruir la gobernanza, convocar eventos y movilizaciones, interpelar a gobernantes, negar créditos, derogar leyes", dice el texto del Comando Sur citado por Rangel.
El periodista también alertó que el informe revela los preparativos y entrenamientos dirigidos para la agresión a "la región central de Venezuela donde se concentra el poder político-militar, para luego enumerar los activos militares dispuestos para la operación’, donde participarían fuerzas especiales desplegadas en Colombia y el Comando Sur.
Mientras tanto, agregó Rangel, reina el silencio de la dirigencia opositora ante las acciones vandálicas y armadas propiciadas en sus concentraciones cuya "primera interpretación de esa conducta es que no es la vía electoral, democrática, la que quieren recorrer" y apuntó que sin el apoyo de factores extranjeros como Estados Unidos les sería imposible continuar el plan.