FARC: Gobierno de Santos pretende sustituir texto de acuerdo
Los negociadores de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) aseguraron que quieren “honrar sus compromisos”, especialmente “el acordado oralmente” sobre la conclusión de los diálogos “en un plazo máximo de seis meses”, propósito que no será “viable” si el Gobierno “comienza a cuestionar” lo acordado
La delegación de paz de las FARC manifestó ayer su “perplejidad” ante la posición del Gobierno de Colombia, que pretende “sustituir” el texto del acuerdo sobre justicia transicional anunciado por ambas partes el pasado 23 de septiembre por un “comunicado” más simple que contiene sus bases, publicó Granma en su portal.
Las FARC “manifiestan su perplejidad ante la posición adoptada por el Gobierno (…) pretendiendo sustituir el acuerdo de creación de una jurisdicción especial para la paz por el comunicado elaborado para dar a conocer dicho acuerdo”, afirmó hoy la guerrilla en La Habana, sede permanente de los diálogos de paz desde 2012.
En un texto leído por el jefe insurgente “Carlos Antonio Lozada”, alias de Luis Antonio Losada, la guerrilla insiste en que “un comunicado sobre distintos aspectos de las conversaciones es solo eso, un comunicado”, y que incluso abarca puntos “que no hacen alusión alguna a la jurisdicción de paz, sino a otros temas”.
El pasado 23 de septiembre ambas partes anunciaron y firmaron un comunicado de dos páginas que contiene las bases del sistema especial de justicia para la paz, aunque el acuerdo está desarrollado en 75 principios y normas en otro documento de 18 páginas que no se ha dado a conocer.
Los negociadores de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) aseguraron que quieren “honrar sus compromisos”, especialmente “el acordado oralmente” sobre la conclusión de los diálogos “en un plazo máximo de seis meses”, propósito que no será “viable” si el Gobierno “comienza a cuestionar” lo acordado.
Además, la guerrilla señaló la necesitad de realizar “desarrollos posteriores” en este acuerdo de justicia transicional, como en “el resto de acuerdos alcanzados”, y anunció su decisión de “acometerlos a la mayor brevedad posible” para evitar que estas ampliaciones se utilicen para “subvertir” el contenido de los convenios.
“No haremos más polémicas sobre un asunto tan trascendental para la reconciliación que solo se aclara con la publicación del acuerdo”, concluyó.
Por su parte, la Delegación de Paz del Gobierno no formuló declaraciones a la prensa ayer, pero el viernes su jefe, Humberto de la Calle, declaró que el texto del acuerdo suscrito tiene cierta “ambigüedad” y requiere ser “preci- sado”.
“El Gobierno considera que en algunos casos hay textos cuya interpretación posterior a su redacción sugiere un cierto grado de ambigüedad que debe ser precisado”, indicó De la Calle, dando a entender que el acuerdo sobre justicia no “está cerrado”.
De la Calle hizo estas afirmaciones después de que su contraparte, Iván Márquez, dijera que la guerrilla seguirá negociando “sin alterar lo ya acordado” el 23 de septiembre, cuando ambas partes fijaron las bases para juzgar los crímenes cometidos a lo largo del conflicto armado.
“La delegación de las FARC manifiesta su perplejidad ante la posición adoptada por el Gobierno.
