Trump amenaza a Venezuela y reclama falsa devolución del petróleo en escalada de agresiones
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha vuelto a amenazar a Venezuela, afirmando de manera incoherente que el petróleo venezolano le pertenece. Esta declaración provocativa fue realizada a través de su cuenta en la red social Truth Social, donde advirtió que “Venezuela está completamente rodeada por la Armada más grande jamás reunida en la historia de Sudamérica”. Trump agregó que “la conmoción para ellos será como nunca antes la han visto, hasta que devuelvan a Estados Unidos todo el petróleo, las tierras y otros activos que nos robaron previamente”.
La amenaza se intensifica con la orden de Trump de imponer un bloqueo total y completo a todos los petroleros autorizados que entran y salen de Venezuela, un paso más en la escalada de presión de Washington sobre el país. Además, Trump arremetió contra los migrantes venezolanos en Estados Unidos, estigmatizándolos como criminales, delincuentes y terroristas. “Están siendo devueltos a Venezuela a un ritmo acelerado. Estados Unidos no permitirá que criminales, terroristas ni otros países roben, amenacen o dañen a nuestra nación”, afirmó.
El 10 de diciembre, la vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, denunció el robo de un buque petrolero en el mar Caribe, un hecho que Trump confirmó. Rodríguez calificó esta acción como un ilícito internacional y un ataque directo a los recursos de la nación. “Caen las máscaras. La verdad ha sido develada. El objetivo real de EEUU es el petróleo de Venezuela; robarlo y apropiárselo ilegítimamente”, expresó.
En respuesta a estas agresiones, Venezuela ha denunciado ante la ONU el acto de piratería cometido por Estados Unidos, entregando una carta al Consejo de Seguridad. En la misiva, se argumenta que el robo del buque petrolero constituye una violación del derecho internacional, ya que se trataba de una embarcación privada que realizaba comercio lícito. Las autoridades venezolanas advierten que la operación estadounidense no solo vulnera la libertad de navegación, sino que también representa un precedente peligroso para la seguridad marítima en la región.
