Este martes continúan diálogos de paz entre FARC-EP y gobierno colombiano
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) llamaron a cumplir con el orden pactado en la Agenda de Paz
Las delegaciones de las FARC-EP y el gobierno colombiano continúan este martes en La Habana(Cuba) las conversaciones como parte de un nuevo ciclo del proceso de paz, centrado actualmente en el tema de las víctimas del conflicto en esa nación suramericana.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) llamaron a cumplir con el orden pactado en la Agenda de Paz, al iniciar el primer ciclo de este 2015 de diálogos con el gobierno de Juan Manuel Santos, para poner fin al conflicto armado en Colombia.
Dentro del marco general aludido y con pleno espíritu de reconciliación, reanudamos los diálogos, esperando que se continúe con el cumplimiento de lo acordado en los términos conocidos por el pueblo de Colombia y el mundo entero, afirmó la insurgencia en un comunicado.
El respeto debido a este fundamento no puede ser descarrilado con fórmulas ajenas al proceso, agregó la delegación de las FARC-EP, que mantiene conversaciones de paz en La Habana desde 2012 con el Ejecutivo de Santos.
"Es necesario decir que en atención al orden de la Agenda todo tiene su momento y lugar, lo cual no da espacios a soluciones postizas como los referendos con sabor y afanes electorales que escapan a lo ya convenido", aseveró la insurgencia.
Al respecto, las FARC-EP consideraron no sentirse aludidas "por normas que pretenden invadir las esferas de competencia y decisión de la instancia única de entendimiento que es la Mesa de Diálogos de Paz de La Habana".
Tras alcanzar consensos en los temas de reforma rural integral, participación política y drogas ilícitas, guerrilla y gobierno debaten las cuestiones relacionadas con las víctimas del conflicto.
Sobre tal punto la insurgencia señaló la necesidad de convenir ya los procedimientos y mecanismos para lograr la reparación a las víctimas.
Recordó que este compromiso de todos los actores vinculados al conflicto, armados y no armados, sin consideración de su estatus, jerarquía, condición u origen, independientemente de que hayan hecho y hagan o no parte del Estado.