Plan antiraní de EEUU aumentará sus tensiones con Europa
Diplomáticos europeos disienten con el intento de EE.UU. por prorrogar el embargo de armas a Irán y dicen que está tensando sus lazos con sus aliados.
En fechas recientes han surgido informes que indican que el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, prepara “un argumento legal” para que Washington siga siendo un “Estado participante” en el acuerdo nuclear, en un intento por presionar al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) para que extienda el embargo de armas a Irán.
Según la resolución 2231 del CSNU, Irán tiene prohibido comprar armas ofensivas desde 2015 hasta un período de cinco años. La cláusula expirará el próximo 18 de octubre y, a partir de entonces, el país persa podrá comprar armas a otros países.
El representante especial de EE.UU. para Irán, Brian Hook, había anunciado anteriormente que Washington está trabajando para extender el plazo del embargo de armas de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) contra Irán, pues considera que es una “negligencia diplomática” permitir que dicho bloqueo sea levantado a finales de este año en curso.
Los esfuerzos del Gobierno estadounidense, presidido por Donald Trump, no obstante, no cuentan con el apoyo internacional, ni siquiera el de sus aliados europeos, es decir, el Reino Unido, Francia y Alemania, que son, asimismo, firmantes del pacto nuclear, de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés).
La agencia estadounidense Bloomberg ha publicado este martes una nota en la que avisa que el Gobierno de Trump “está intensificando las tensiones con sus aliados” con su nuevo plan antiraní.
El informe cita a un grupo de diplomáticos europeos que, bajo condición de anonimato, ha señalado que Washington no tiene derecho alguno a presionar por que se aplique la extensión del embargo de armas a Teherán después de que decidiera salirse del pacto nuclear.
De acuerdo con el reporte, la renovación de tales sanciones a Irán, que Washington tanto desea, tampoco será fácil, pues Rusia ha indicado repetidamente que se opondrá a tal medida, además de que tampoco es probable que China acepte la propuesta de EE.UU.
“Los funcionarios de EE.UU. (…) tratan de permanecer fuera del pacto, con el que no están de acuerdo, excepto cuando necesitan algunas de sus disposiciones para presionar a los aliados a fin de que también lo abandonen”, se lee en el informe.
Desde que se retirara del PIAC, EE.UU. ha hecho denodados esfuerzos para obligar a los firmantes europeos del pacto a abandonarlo con el fin de fortalecer su frente contra Irán. Sus aliados, sin embargo, no han cedido hasta el momento a dichas presiones.
Viendo que sus deseos podrían verse truncados, Trump llegó en enero a amenazar a Europa con imponer aranceles a la importación de vehículos si no le respaldaba en las disputas sobre el acuerdo nuclear con Irán.