España plantea a la UE cambiar sanciones por diálogo en Venezuela
La nueva vía, si se confirma, puede chocar con la postura de la administración de Trump, que cada vez está endureciendo su presión sobre el Gobierno de Maduro
España se plantea dar este lunes un drástico giro a su posición sobre Venezuela durante el consejo de ministros de Asuntos Exteriores de la UE que se celebra en Luxemburgo.
En ese sentido el ministro de Exteriores, Josep Borrell, defender defenderá ante sus homólogos europeos la necesidad de mantenerse firme ante el "régimen" de Nicolás Maduro, pero, esta vez apostando por el diálogo en lugar de las sanciones como vía para resolver los problemas económicos que enfrenta el país latinoamericano.
La nueva vía, si se confirma, puede chocar con la postura de la administración de Donald Trump, que cada vez está endureciendo su presión sobre el Gobierno de Nicolás Maduro.
De acuerdo a lo reseñado por El País, de España, el giro de España, ya apuntado por el Gobierno de Pedro Sánchez, se materializará durante un almuerzo de trabajo presidido por la alta representante de Política Exterior, Federica Mogherini.
Mogherini ha incluido el debate sobre Venezuela a instancias, precisamente, de la delegación española, una petición secundada también por Francia, Italia y Portugal. Fuentes diplomáticas esperan que del almuerzo salga una batería de ideas “sobre cómo promover el diálogo político en Venezuela y cómo abrir cauces de colaboración”.
Las mismas fuentes apuntan que la UE no puede permanecer impasible ante “una crisis humanitaria que ha provocado un éxodo de venezolanos, con un gran impacto en otros países de la región”.
La propuesta que defenderá Borrell rompe con la estrategia seguida por el anterior Gobierno de Mariano Rajoy, que impulsó el castigo diplomático de la UE contra el presidente Maduro.
En enero de este año, Bruselas incluyó a los siete primeros altos cargos venezolanos en una lista negra que les impone una prohibición de viajar a la UE y la congelación de los activos de que dispongan en territorio comunitario.
El "castigo" se reforzó en junio, a los pocos días de que Borrell sustituyera al anterior ministro, Alfonso Dastis. Y se tradujo en la inclusión en la lista negra de otros 11 funcionarios venezolanos.
Pero el nuevo ministro indicó enseguida su preferencia por una vía alternativa a las sanciones y favorable a la búsqueda de soluciones pactadas.
Con información de El País
