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Trump dejaría sin cobertura sanitaria a 23 millones de estadounidenses
"El análisis devastador de la Oficina Presupuestaria del Congreso (CBO) deja claras las pésimas consecuencias para las familias trabajadoras y los mayores en todo el país", dijo la representante demócrata Nancy Pelosi
La reforma sanitaria del presidente de EE.UU., Donald Trump, que desmontaría la de Barack Obama, dejaría sin cobertura a 23 millones de ciudadanos en la próxima década, indicó la Oficina Presupuestaria del Congreso (CBO).
La ley de reforma sanitaria, impulsada por el Partido Republicano y aprobada a principios de mayo por la Cámara de Representantes, haría perder en 2018 el seguro médico a 14 millones de estadounidenses y para 2026 la cifra ascendería a 23 millones, según estimaciones de la Oficina Presupuestaria del Congreso.
Los legisladores republicanos, luego de siete años de dura crítica hacia el Obamacare, enfrentan ahora enormes dificultades para llevar a cabo una reforma. El objetivo de un grupo de republicanos que reescriben la ley, aprobada por la Cámara de Representantes, es acabar con los fallos del sistema y lograr el suficiente consenso político para ser aprobada.
Los cambios han ampliado la protección a personas con graves condiciones médicas preexistentes, pero delegan a cada Estado la posibilidad de que las personas con antecedentes tengan que pagar más por su seguro médico, algo que está prohibido ahora con Obamacare.
Los republicanos insisten en que la prioridad es reducir el coste sanitario mientras se trata de mantener la mayor cobertura posible. Pero en ese terreno la proyección de la Oficina Presupuestaria del Congreso también les da malas noticias. Calcula que la reforma reduciría el déficit público del Gobierno federal en 119.000 millones de dólares en una década, mientras que en marzo estimó que el ahorro sería de 150.000 millones.
"El análisis devastador de este miércoles deja claras las pésimas consecuencias para las familias trabajadoras y los mayores en todo el país", aseguró la líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
La Casa Blanca, por su parte, rechazó las estimaciones del CBO por considerarlas poco fiables y que históricamente han fallado en predecir el futuro.