Más de 60 mil desplazados por recrudecimiento de la violencia en Yemen
El conflicto armado ha desplazado a millones de personas y asesinado casi dos mil civiles desde marzo del 2015
Al menos 62 mil personas han sido desplazadas de las regiones central y occidental de Yemen en las últimas seis semanas. La población huye de la violencia que se ha recrudecido durante el pasado mes.
Así lo reporta la agencia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur). En una conferencia de prensa en Ginebra su portavoz, William Spindler, advirtió acerca de la crisis humanitaria en ese país.
“La mayoría de los desplazados necesita asistencia urgente. Algunos se han refugiado en espacios comunitarios y públicos, como escuelas y centros de salud, mientras que otros viven en edificios sin terminar o a la intemperie. Muchos de los desplazados, numerosos niños entre ellos, sufren desnutrición y otros padecen angustia y requieren asistencia psicosocial”, dijo el portavoz de Acnur.
Los desplazados precisan de ayuda de emergencia por las enormes carencias en sus condiciones de vida. Hacinamiento, brotes de enfermedades y desnutrición son sólo algunos de los riesgos a los que se ven expuestos. Los relatos de su movilización retratan los horrores del conflicto. “Nos enfrentamos al peligro tanto del cielo como de la tierra. Nos escondimos en casa durante la mayor parte del tiempo, pero cuando estuvimos cerca de morir y nuestra casa quedó dañada por los combates, sólo tuvimos que irnos”, declaró una madre de tres, de la ciudad de Mokha en la costa oeste de Yemen.
Acnur ha advertido que la población más vulnerable son los niños por las condiciones insalubres. Spindler informó que la Acnur ha respondido rápidamente en todo el país proporcionando albergues y artículos de primera necesidad. Sin embargo, hasta 35 mil personas se encuentran aún retenidas en la gobernación de Taiz, en la costa yemení, en medio del conflicto. Acnur ha solicitado reanudar el acceso humanitario a estas zonas y movilizar una respuesta coordinada con los actores nacionales.
“Incluso antes de la actual escalada en Taiz estábamos sufriendo, pero ahora la situación es insoportable” declaró uno de los desplazados. “Vimos a la gente morir frente a nuestros ojos. Otros resultaron heridos. Así que decidimos marcharnos. Aunque estamos luchando aquí, todavía es mejor que vivir en peligro en Taiz”.