Vida de Fabricio Ojeda está signada por su entrega a la lucha popular y la humildad
En su homenaje, este lunes una movilización popular desde el Cementerio General del Sur, en Caracas, acompañará sus restos al Panteón Nacional
Como una persona afable, humilde, buen periodista y entregado a la lucha popular con perseverancia y responsabilidad calificó el economista y exgerrillero, Julio Escalona al luchador revolucionario Fabricio Ojeda.
Escalona, uno de sus compañeros de lucha y militante de izquierda, exaltó al líder popular trujillano, a propósito del traslado de sus restos este 23 de enero al Panteón Nacional, en honor a su rebeldía, lucha y entrega por la democracia.
En entrevista este lunes en el programa La pauta de Hoy, de Venezolana de Televisión, Escalona, relató que conoció a Ojeda en la clandestinidad, en espacios de la Universidad Central de Venezuela (UCV), donde eran dirigentes estudiantiles y fue así como establecieron una relación muy cercana.
Consideró Escalona que con la siembra de Fabricio Ojeda en el Panteón Nacional se le reivindica como una persona que con dignidad y valentía representó al pueblo y no la dominación.
"Fue nuestro amigo, nuestro compañero y cuando se retiró como diputado al extinto Congreso Nacional significó un gesto importante de mucha responsabilidad y entrega", acotó.
Escalona remenoró que tras el derrocamiento de Pérez Jiménez comenzó en el país otra etapa de dictadura disfrazada de "democracia", signada por la persecución, torturas y desapariciones de la militancia de izquierda.
"Se arremetió contra la movilización popular, y en este escenario fue vital la formación política de la juventud, lo que considero debe retomarse con fuerza ante las arremetidas de la derecha contra la Revolución Bolivariana en la actualidad", añadió.
Vale destacar que Fabricio Ojeda fue electo por voluntad popular como diputado al Congreso Nacional, en diciembre de 1958, pero decidió renunciar a ese cargo en junio de 1962 e irse a las montañas para combatir, junto a los grupos guerrilleros, por la liberación de Venezuela.
El 20 de junio de 1966, Ojeda fue capturado en La Guaira, estado Vargas, por el Servicio de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (Sifa), bajo el gobierno de Raúl Leoni. Dos días después, y en muy extrañas circunstancias, apareció asesinado en su celda.
En su homenaje, este lunes una movilización popular desde el Cementerio General del Sur, en Caracas, acompañará sus restos al Panteón Nacional.
