¿Y no será el Haarp que está causando esta sequía?
“La biografía de la calle Igualdad” de Porlamar, es un libro del poeta Luis “Lucho” Velásquez, que leyó el periodista Pedro Cuartilla y pensó: “Cómo me gustaría escribir un libro sobre la calle principal de Tacarigua y describir las casas, la gente y sobre todo hablar de mis amigos que tuve en la infancia”.
El periodista, quien como siempre estaba escuchando su emisora predilecta Mundial Margarita (1020AM, 92.9FM y www.radiomundial.com.ve), hacia estas reflexiones un domingo acostado en su hamaca, cuando escuchó en la estación la frase: “El fenómeno del niño no es juego”, y fue ahí que observó detenidamente el paisaje y vio que éste estaba pintado por el pincel mustio de la sequía, lo cual le recordó una conversación que tuvo con un amigo periodista, cuando la vaguada del 2010, quien le habló del proyecto Haarp, cuyas siglas en inglés se traduce en High Frequency Advanced Auroral Research Project., que traducido al español sería, Programa de Investigación de Aurora Activa de Alta Frecuencia.
Este proyecto de la Fuerza Aérea norteamericana son unas instalaciones militares situadas en Gakona, Alaska., el cual consiste en 180 antenas que funcionando en conjunto será como una sola antena que emitirá 1 GW =1.000.000.000 W, es decir un billón de ondas de radio de alta frecuencia, las cuales penetran en la atmósfera inferior.
Pero lo cierto del caso es que este programa tiene la capacidad, según la evidencia científica, de desencadenar inundaciones, sequías, huracanes y terremotos. Desde un punto de vista militar, Haarp es un arma de destrucción masiva. Potencialmente, constituye un instrumento de conquista capaz de desestabilizar selectivamente los sistemas agrícolas y ecológicos de regiones enteras.
El periodista Pedro Cuartilla, quien investigaba todo esto por Internet, se atemorizaba y entonces no siguió, sino que pensó: “A esto hay que meterle la lupa, pues no es de dudar que los gringos son capaces de todo y por eso no es de extrañar que hayan provocado las inundaciones del 2010 y ahora la sequía terrible que estamos viviendo. Esto no parece, juego, ni ficción, sino la pura realidad. Aquí les dejo eso”.
P.S. Le agradezco profundamente al Dr. Sixto Urdaneta, por calmarme unos dolores que venía sufriendo más de un mes en el brazo, por efectos de hernias en la columna. Por mi parte lo recomiendo ampliamente.