La Vinotinto enfrentó una dura realidad al caer 4-0 ante Bolivia en el Estadio Municipal de El Alto. La altitud de 4,100 metros sobre el nivel del mar se convirtió en un adversario implacable para los jugadores venezolanos, quienes no lograron adaptarse a las difíciles condiciones.
Desde el pitido inicial, Bolivia mostró su dominio en el campo. Apenas transcurridos 13 minutos, Ramiro Vaca sorprendió con un gol desde fuera del área, desatando la euforia en el estadio y hundiendo los ánimos de la Vinotinto. La situación se complicó aún más cuando, en los últimos segundos del primer tiempo, un penalti cometido por Jon Aramburu permitió a Carmelo Algarañaz ampliar la ventaja para los locales.
El inicio del segundo tiempo no trajo alivio para Venezuela. Apenas un minuto después del reinicio, Miguel Terceros anotó el tercer gol para Bolivia, prácticamente enterrando las esperanzas de remontada de la Vinotinto. A pesar de algunos intentos aislados de Jhonder Cádiz y Jhon Murillo, la falta de precisión en las finalizaciones fue evidente.
En el minuto 89, Enzo Monteiro selló la goleada con un cuarto gol, dejando a Venezuela sin respuestas. Con este resultado, la Vinotinto deberá reflexionar profundamente sobre su rendimiento y buscar soluciones rápidas para enfrentar a Uruguay en su próximo encuentro en Maturín el próximo martes de 10 de septiembre.
A pesar del doloroso revés, los jugadores y el cuerpo técnico están decididos a aprender de esta experiencia y a seguir luchando por un lugar en el Mundial. La afición mantiene la esperanza y el apoyo incondicional a su selección, confiando en que mejores días están por venir.
