Venezuela crea el primer protocolo de tratamiento para pacientes con biopolímeros en el mundo

El Ministerio para la Salud y diversas asociaciones médicas del país instalaron, este jueves, la primera mesa técnica de trabajo para elaborar un protocolo de tratamiento a seguir para pacientes portadores de biopolímeros (silicone líquida).
El presidente de la Sociedad Venezolana de Cirugía Plástica, Ramón Zapata, subrayó que los biopolímeros son sustancias ilegales que, de inyectarse en el cuerpo, pueden producir la muerte. El deceso ocurre cuando la silicone líquida entra a los vasos sanguíneos, se desplaza hacia los pulmones, ocasionando embolia pulmonar. No obstante, mencionó que en los casos que no llevan a la muerte, las consecuencias de este compuesto en el organismo pueden permanecer para toda la vida.
“Es una reunión muy importante para el país, ya que finalmente se están dando los toques finales para un protocolo de tratamiento a este problema que es la inyección de biopolímeros. Esta sustancia no es inyectada por personas que son médicos, sino por personas sin experiencia o que trabajan en el área de la estética y la belleza”, dijo, en declaraciones a los medios de comunicación.
Precisó que en la actualidad unas 7.000 personas se han registrado en el Ministerio para la Salud por presentar síntomas relacionados a la inyección de biopolímeros, por lo que hizo un llamado a la población a acudir a los centros de salud y al ente gubernamental cuando se es portador de esta sustancia.
“De allí la importancia del protocolo, pues permite clasificar a los pacientes. Las personas se inyectan con el propósito de mejorar su belleza y acuden a personas que no son médicos que les ponen estos compuestos de forma ilegal. Entonces, el protocolo contemplará un tratamiento acorde a los grados de síntomas”, explicó.
En ese sentido, dijo que los pacientes asintomáticos entrarían en el grado cero y a medida que los síntomas aumentan por las reacciones sistémicas a la sustancia se implementarían algunos tratamientos y, posteriormente, ameritaría el paciente someterse a alguna intervención quirúrgica para extraer, en lo posible, estos compuestos.
Sin embargo, resaltó que la prevención es lo primordial y reiteró que estos compuestos no son aptos para las personas que, por lo general, permiten le sean inyectados en glúteos, tríceps, pectorales, cara y en las mamas.
“Hay casos críticos en los cuales las personas pierden el tejido mamario y hay que quitarles hasta el músculo por la infección y la necrosis tan severa que se produce en estos casos. La recomendación es que busquen médicos certificados y que les digan no a los biopolímeros”, llamó el médico.
Recordó que desde el año 2012 el Gobierno Nacional prohibió el uso y aplicación de sustancias de relleno (biopolímeros, polímeros y otros afines) en tratamientos con fines estéticos y ahora seguirá a la vanguardia con la puesta en práctica próximamente de este protocolo de atención.
Al respecto, ese año quedó prohibido el uso y aplicación de las referidas sustancias en lugares públicos y privados, establecimientos de salud públicos y privados, así como en estéticas, peluquerías, barberías, salones de belleza, salones de cosmetología, gimnasios, centros de adelgazamiento, centros de masajes, spas y hoteles.
Por su parte, el cirujano plástico César Oliveros indicó que en la reunión de este jueves se planteó que hospitales del país acondicionen áreas específicas para el tratamiento de personas inyectadas con biopolímeros.
“Esto es un problema de salud pública que está solapado porque muchas personas están calladas y no dicen que se han inyectado esta sustancia, además los pacientes no saben dónde acudir. Lo ideal es que haya hospitales pilotos en cada uno de los estados del país, en los que, de forma pública, puedan ser atendidos estos pacientes, ya que actualmente no hay un hospital que esté designado para tal fin”, indicó.
En la reunión estuvieron presentes representantes de la Sociedad de Inmunología, Traumatología, Medicina Interna, Cirugía Plástica, Psicología, Reumatología, entre otros.


