Venezolanos debutantes tienen rol protagónico
La promoción de 2014 tiene un lugar en la historia reciente del beisbol venezolano por haber implantado un nuevo tope de debuts en las mayores, establecida en veinte, pero la generación de este año no solo amenaza con superar esa cifra de graduados, sino que muchos de quienes están viviendo sus primeros momentos como grandeligas lo están haciendo en rol protagónico.
Hasta la fecha, un total de nueve noveles peloteros criollos se estrenaron en la gran carpa. El 1° de junio del año pasado, David Peralta se iniciaba con Cascabeles y significaba el sexto compatriota en jugar por primera vez en este nivel.
El último en probar las mieles del mejor beisbol del mundo en 2015 fue el jardinero barinés Ramón Flores.
Debutó la noche del sábado frente a los Atléticos de Oakland y, aunque no dio imparables, se lució con su defensa y potente brazo.
“Creo que su techo es bastante alto, ofensiva y defensivamente”, dijo el mánager Joe Girardi a mlb.com sobre el joven llanero, que ayer disparó su primer imparable.
Mientras Flores se estrenaba el uniforme de las mayores, Williams Pérez dominaba con su esquiva sinker y mañoso cambio a los bates de los Gigantes de San Francisco, apenas en su tercera apertura con los Bravos de Atlanta.
En su primera actuación, al de Portuguesa le fabricaron cuatro rayitas, pero en sus pasadas cuatro actuaciones solo recibió dos (0.90 EFE).
“Ha estado impresionante”, expresó su mánager Fredi González a mlb.com, “por lo que seguiremos colocándolo. Si sigue tirando ese tipo de salidas, estará bien”.
A mitad de la semana pasada Eduardo Rodríguez era llamado por los Medias Rojas de Boston y tiraba 7.2 entradas en blanco en su debut contra los Rangers de Texas. Esto le valió una salida más con el equipo grande (miércoles).
Odúbel Herrera y Ángel Nesbitt, por su parte, están en el róster de Grandes Ligas desde el día inaugural. Herrera se estableció como el jardinero central de los Filis de Filadelfia, aunque su ofensiva ha decaído (.243 AVE).
Mientras, Nesbitt se está ganando un lugar importante en el relevo de los Tigres para trabajar hacia los últimos innings de los encuentros (3.54 EFE).
Desde la receptoría, Carlos Pérez entró a las mayores haciendo sonar los bombos y platillos. En su primer compromiso con los Angelinos de Los Ángeles disparó cuadrangular que le dio la victoria a su equipo. Tras ese batazo, le han dado el chance de estar detrás del plato en catorce juegos (.292 AVE).