Primera imagen que se obtiene del nacimiento de un planeta
En los últimos años hemos detectado miles de exoplanetas: ya no hay nada emocionante en encontrar una estrella distante con varios mundos en órbita. Pero hoy los astrónomos han anunciado que pudieron ver un exoplaneta en mitad de su formación.
El disco de polvo de la estrella PDS 70 ya había sido detectado por los instrumentos SPHERE y NAOS-CONICA del Very Large Telescope y el generador de imágenes Coronagraphic Near-Infrared de Gemini, todos ubicados en Chile. Pero después de volver a analizar los datos y tomar más observaciones con SPHERE, los científicos encontraron lo que estaban buscando: pruebas sólidas de una mancha en el polvo.
“Los planetas nacen en discos circunestelares. Estos discos están hechos de gas y polvo que rodean estrellas jóvenes durante aproximadamente 10 millones de años”, explicó a Gizmodo la estudiante de posgrado Miriam Keppler del Instituto Max Planck de Astronomía en Alemania. “El hecho emocionante de nuestro descubrimiento es que tenemos aquí una detección excepcionalmente sólida de un planeta joven, todavía contenido en un disco de ese tipo”.
Los científicos ya pensaban que PDS 70 podría tener un disco protoplanetario en 1992, y de hecho detectaron el disco en 2006. Los investigadores continuaron examinando esta región, la última vez el 24 de febrero de este año. SPHERE bloquea la luz de la estrella, lo que permite a los investigadores observar el disco de polvo y el planeta —mucho más tenues— en varias longitudes de onda. Los datos antiguos y nuevos muestran la presencia perceptible de un planeta que deja un rastro detrás de él: un espacio en el disco.
Otro análisis estimó que este planeta a 1000 grados Celsius tiene entre 2 y 17 veces la masa de Júpiter, con un radio de alrededor de 1,4 a 3,7 veces el de Júpiter. Probablemente tiene 5,4 millones de años y está orbitando PDS 70 a aproximadamente 22 veces la distancia de la Tierra al Sol. Se necesitan 118 años terrestres para que este planeta complete una órbita alrededor de su estrella.
Los dos estudios que detallan el nuevo planeta aparecen en la revista Astronomy and Astrophysics.
Es importante estudiar estos planetas jóvenes para comprender cómo se forman los planetas de manera general. “La medición del espectro nos da información sobre cómo las atmósferas planetarias se ven en una etapa muy temprana de su vida”, dijo Keppler. “Esto es muy importante para calibrar modelos teóricos que predicen las propiedades de los planetas a medida que evolucionan”.
Por supuesto, esta investigación solo araña la superficie; hay muchos más planetas y discos protoplanetarios para estudiar antes de que comprendamos por completo el proceso de formación planetaria. Nuevos telescopios como el Telescopio Espacial James Webb y el Gran Conjunto Milimétrico / submilimétrico de Atacama podrían ayudar a arrojar luz (o, en este caso, bloquear la luz) en este misterioso fenómeno cósmico.