Ocho maneras de endulzar tus comidas naturalmente
Para endulzar nuestros alimentos existen opciones más sanas y nutritivas que el azúcar.
Aquí descubrirás que existen muchas formas de lograr ese toque de dulzura con opciones más saludables.
1. La canela
La canela cuenta naturalmente con un sabor dulce y puede ser utilizada como polvo molido o en rama.
Algunas personas han incorporado el uso de canela como sustituto de su azúcar en el café y postres.
Puedes espolvorear la canela sobre la fruta para intensificar su sabor. A su vez, le estarás agregando antioxidantes y fitonutrientes.
2. La vainilla
¿Quién no ama la vainilla? Es dulce y fragante. Además puede endulzar tus alimentos de manera increíble cuando se trata de café y postres como pasteles o galletas.
El ingrediente activo de la vainilla es un compuesto orgánico denominado vainillina.
Este es un poderoso antioxidante que puede ayudar a compensar el daño oxidativo del cerebro y ayudar a prevenir la enfermedad del Alzheimer y la de Parkinson.
Prueba con añadir un par de gotas de vainilla líquida a tu leche o infusiones y descubrirás que el azúcar deja de ser necesaria.
3. Raíz de remolacha
Una gran cantidad de azúcares refinados se hacen a partir de la remolacha azucarera. Quizás ni siquiera lo sabes, porque no es algo demasiado común.
Sin embargo, si estás buscando endulzar tus alimentos sin azúcar, esta es una excelente alternativa. Si te gusta hacer jugos o batidos, añade un trozo de remolacha para endulzar.
4. Miel de maple
El jarabe de arce o maple es una excelente fuente de manganeso y contiene calcio, potasio y zinc.
Este edulcorante natural es rico en antioxidantes, ayuda a neutralizar los radicales libres y a reducir el daño oxidativo.
Escoge los jarabes de arce de grado B. Existen dos grados, el A y el B, pero este último es más natural y ha sido menos procesado.
Lo podrás reconocer porque es más oscuro debido a que contiene más antioxidantes que los jarabes más ligeros.
5. Jugo de frutas
Las frutas son una excelente fuente de azúcar. A diferencia de los azúcares comerciales que ya han sido procesados, estos son completamente naturales.
Al preparar jugo, obtienes la fructosa y puedes endulzar tus alimentos con el mínimo esfuerzo.
Eso sí, te recomendamos elegir el jugo hecho en casa, ya que el pasteurizado te hará casi el mismo daño que la azúcar refinada.
Puedes utilizar el jugo de naranja o manzana para endulzar salsas o carnes, ¡te encantará!
Para las infusiones, puedes elegir los jugos de durazno y frutas similares.
6. Jarabe de yacón
El jarabe de yacón (Smallanthus sonchifolius) se extrae de las raíces de la planta del mismo nombre.
Es un jarabe de sabor dulce, con una consistencia similar a la melaza y una gran fuente de fructooligosacáridos.
Estos alimentan a las bacterias amigables en el intestino y producen ácidos grasos de cadena corta, lo que ayuda en la pérdida de peso. Utilízalo en tus tés o añádelo a los batidos.
Este producto es recomendable para endulzar alimentos crudos, ya que no es recomendable cocinar con él.
7. Azúcar de coco
La mayoría de la gente ha oído hablar de las ventajas del agua de coco, de su leche, su harina o del coco fresco.
No obstante, cada vez son más los que están usando el azúcar de coco como su edulcorante natural debido a su baja carga glucémica y rico contenido mineral.
El azúcar de coco es rica en:
Polifenoles
Minerales (Hierro, zinc, calcio, potasio, fósforo)
Antioxidantes
El azúcar de coco se extrae la savia de las flores del coco y luego se calienta.
Lo mejor de todo es que puedes usarla en todas tus recetas y para endulzar tus alimentos porque cuenta con la misma densidad del azúcar.
8. La estevia
La estevia se convertido en una de las opciones para endulzar tus alimentos más comunes. A diferencia de muchos otros alimentos que dicen ser saludables y no lo son, esta opción es realmente benéfica.
Las hojas de la estevia pueden ser 300 veces más dulce que el azúcar, pero sin ningún problema a largo plazo.
Existen muchas marcas que extraen el néctar de la estevia y la vuelven polvo, pero es mucho mejor usar la hoja.
A partir de ella puedes extraer su néctar siguiendo este procedimiento:
Calienta agua.
Cuando hierva, retírala del fuego, agrega las hojas de estevia y déjalas infusionar hasta que se enfríe.
Guarda en un recipiente el néctar y úsalo cuando lo requieras.
Solo necesitarás unas pocas gotas para utilizarlo en lo que desees, desde cremas o postres hasta cualquier alimento que se te antoje dulce.