¿Nuestra soberanía, no llega hasta el Esequibo?
Qué doloroso es vivir en un país, con un pueblo lleno de indolencia y falto de agradecimiento por la patria donde nacieron; personalmente, después de una niñez llena de ilusiones y de una juventud rebelde, siento en este momento que se contradicen todas aquellas victorias contra la dependencia en manos extrañas. Veo como todo un pueblo se vuelca a la calle para protestar por la injerencia yanqui, como si esto fuera nuevo y como si no tuviéramos que prepararnos cada día para repeler cualquier intención de violar nuestra soberanía. Lamentablemente no vi ni una pancarta, ni opinión ante los medios, contra la violación del acuerdo por parte de Guyana.
Escuché el discurso del presidente, donde felicitaba a nuestras fuerzas armadas, por su conciencia en la acción para defender nuestra soberanía, pero no llegue a escuchar cuales eran las medidas tomadas por nuestros ejércitos para rechazar y hacer respetar los acuerdos sobre el Esequibo, sabiendo que el comportamiento de las autoridades de Guyana son una declaración de guerra; a menos, que sin el pueblo saberlo ya el Esequibo no es nuestro. Hago un llamado al pueblo, al que siempre me refiero, a interesarse realmente por el estado de esta reclamación, no solo para que vean el desamor por la patria de muchos de nuestros dirigentes sino para que intenten darlo a conocer al resto, que de seguro no aceptara ningún convenio no aprobado en consenso.
Como lo he dicho leo casi todo lo que se publica en Aporrea y entre ellos también busque alguna opinión sobre la falta de respecto de las autoridades guyanesas; lo que si encontré es lo conducido y confundido que se encuentran muchos escribidores. De repente se dejó a un lado una realidad por una posibilidad, el aparato político los puso a mirar para arriba impidiendo ver lo que está pasando por debajo; y cuando ya estaba por decir que tampoco había ninguna opinión al respecto, apareció el compatriota Oscar Jiménez, con un artículo titulado “Nos borraron a la Guayana Esequiba del mapa”, http://www.aporrea.org/
“Estamos obligados a reconocerlo como nuestro con el conocimiento que tenemos de cuáles eran los límites de la Capitanía general de Venezuela y así como Guyana dibuja su mapa sin rayas de ningún tipo y con los limites donde los ingleses le dijeron que estaban, sin ningún sustento legal para ello; dibujarlo nosotros en nuestros mapas como nos consta que van.”
“Obviamente deberíamos agotar los buenos oficios y la negociación pacífica (pues así lo aceptaron nuestros antepasados, por las razones que sea), pero eso no debe significar jamás que nos dejemos despojar de ese territorio”.
“La justicia mundial (si es que existe) debería fallar en alguna corte a la que se someta la discusión en base a los documentos legales que poseemos; pero si Guyana instruye a sus pobladores en que la tradición de la posesión de la tierra les hace ver que eso es de ellos, difícilmente se podrá solucionar de manera pacífica tamaña injusticia”.
Lo último que se sabe, es que la compañía estadounidense Exxon Mobil inició el 6 de marzo operaciones de extracción en aguas de Guyana cuya soberanía discute Venezuela. Pregunto ¿es esto una violación a la soberanía o no? les copio parte de la información:
“San Juan.- El presidente de Guyana, Donald Ramotar, acompañado por el ministro de Recursos Naturales y Medioambiente, Robert Persaud, visitó el área el miércoles y dijo que estaba "muy impresionado con lo que estaba ocurriendo", informó Efe.”
“La labor de exploración comenzó hoy pese a que Venezuela insiste en que el yacimiento se encuentra en un área cuya soberanía, cuanto menos, no está clara.”
“Esta semana, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Guyana pidió a Caracas que no interfiriera en estas exploraciones en el campo Stabroek Block, que se encuentra en la cuenca entre Guyana y Surinam, reconocida por el Servicio Geológico de EE.UU. como la segunda mayor área del mundo con petróleo sin explorar.”
En mi pasado escrito, toque varias teclas que me parecen fundamentales para tratar de darle un sonido armónico a un mensaje que nos devuelva la Revolución Bolivariana. No hay duda; que es el momento de tocar esa melodía, que le llegue a los cimientos del alma del pueblo y florezca de nuevo el sentimiento Patrio, basta de habladera de paja, son acciones lo que se necesitan para recuperar la patria, no podemos aceptar de ninguna manera la incapacidad, la ineficiencia y la corrupción de aquellos a quien le entregamos por los votos (engañados, manipulados o no), el mandato de servirnos en los cargos de poder, decisión y mando, de la administración del estado.
Por lo anterior y lo presente, No dejemos que se repita esta alegoría de que “Bolívar despierta cada cien años cuando despierta el pueblo”; porque esto significaría, que el resto del tiempo nos las pasamos dormidos; no dejemos dormir los sueños, no esperemos que la intriga y ese “vil egoísmo que otra vez triunfó”, acabe con la esperanza de alcanzar una patria digna llena de amor por sus conciudadanos. Levantemos la voz, echemos nuestra palabra, detengamos esta desidia e incompetencia antes que nos terminen de quitar, lo que dejaron siendo nuestro, todos los que han dado su vida por Venezuela.
Así como se están haciendo marchas y recogiendo firmas contra una posible violación de nuestra soberanía por parte de los yanquis, hagamos lo mismo para rechazar lo que ya está haciendo el gobierno de Guyana con la violación de los acuerdos limítrofes, postergados por la desidia de los que tienen el mandato de hacerlos respetar.
/N.A