No hay hormiga que salte mejor (+Video)
De los 326 géneros de hormigas conocidos, solo tres saltan valiéndose de sus patas. Se conocen otros tres que brincan empleando como punto de apoyo sus mandíbulas, pero no se tenía constancia de ninguno que lo hiciera usando indistintamente esas dos partes de su anatomía. La asombrosa atleta es la Odontomachus rixosus,una especie de hormiga de mandíbula trampa, y este comportamiento se describe en un estudio que acaba de publicar Magdalena Sorger, de la Universidad Estatal de Carolina del Norte.
Se sabía que esta hormiga es capaz de saltar impulsándose con las mandíbulas, algo que le permite escapar de las amenazas y que realiza de dos formas: o cierra con fuerza las mandíbulas contra el suelo, lo que la impulsa hacia el aire; o las usa contra lo que sea que la asusta o ataca para impulsarse hacia atrás y huir. En ambos casos, el insecto no parece controlar la dirección de su salto y a menudo cae de espaldas.
Pero Sorger ha observado en su trabajo de campo en Borneo un comportamiento saltarín desconocido hasta ahora en las distintas especies de Odontomachus. Esta conducta parece tener un carácter exclusivamente destinado a la huida, y es muy peculiar: la hormiga salta apoyándose en sus patas o en sus mandíbulas, y se dirige en su brinco a los lugares que desea.
Sorger, que no sabe si esta destreza sirve también para la caza, ya que solo la ha observado en casos en los que la hormiga quería huir, planea ahora estudiar los mecanismos fisiológicos que permiten esta función a las mandíbulas y las patas, para analizar qué ventajas evolutivas podrían derivarse de esta cualidad.