Nicolás Maduro reafirma su compromiso con el pueblo venezolano ante el injerencia norteamericana
El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, destacó en un reciente discurso que jamás se rendirá ante el imperio norteamericano ni ante las oligarquías de apellidos. Estas declaraciones se produjeron en el contexto de su toma de posesión, programada para el 10 de enero. Durante su intervención, Maduro enfatizó que el pueblo venezolano se juramentará junto a él, reafirmando su determinación de no permitir que el engaño ni la fuerza dominen nuevamente a Venezuela.
“Hoy soy de los barrios, soy obrero, y les digo que no soy de los apellidos ni jamás lo seré. No me rendiré al imperio norteamericano”, afirmó el Jefe de Estado, quien subrayó que la juramentación del 10 de enero no será solo un acto individual, sino una manifestación colectiva del pueblo decidido a construir su propio destino.
Maduro también hizo hincapié en que el proceso se llevará a cabo en paz y unión, asegurando que “no habrá fascismo que pueda detener al pueblo”. En este sentido, expresó su confianza en que Venezuela tiene un futuro marcado por la paz, estabilidad y desarrollo. “Nosotros tenemos doctrinas y somos los únicos con un plan para el país”, añadió.
El presidente venezolano también denunció las intenciones de la extrema derecha de generar violencia y conflicto en la nación. “Cada vez está más deteriorada la propuesta fascista, pero nosotros estamos listos para todas las opciones”, dijo. Enfatizó que no es momento para traidores ni cobardes, sino para una unión absoluta del país y un tiempo de victoria para la patria.
Con estas declaraciones, Maduro busca fortalecer la moral del pueblo venezolano y reafirmar su liderazgo ante las adversidades externas e internas que enfrenta el país.
